Cada 10 años la Comisión Internacional de Límites y Agua, verifica y actualiza el límite territorial que existe con Estados Unidos, ya que en el transcurso del tiempo el Río Bravo cambia su cauce modificando la línea divisoria.

“A partir de Ciudad Juárez hasta Matamoros, esta el Río Bravo y nuestro límite internacional cruce por en medio del cause, entonces cuando se presentan las crecientes el terreno queda erosionado de un país y se movió el rió a otro país, en pequeñas cantidades pero se mueve. Entonces se modifica el cause y ya hay un desplazamiento de línea de un país a otro y como CILA determinamos cada 10 años estos cambios que se presentan en el Río Bravo. Realizamos una contabilidad de terrenos y se levanta una  acta donde estipulamos los cambios y posteriormente si algún país esta interesado en recuperar el terreno que le pertenece, se llevan a cabo las gestiones correspondientes de la reposición del río en su cause anteriormente, pero se lleva a cabo tres años para que se realice la obra”, comentó, Agustín Boone González, representante de la CILA.

Estos trabajos se hacen cada 10 años y se contrata un avión para realizar tomas fotograficas aéreas, y ahí es donde se traza la nueva línea divisoria. El último ejercicio se realizó en el año 2008 por lo que el próximo se realizará hasta el año 2018.

En Nuevo Laredo no existen cambios representativos de gran manera, por lo que el Río Bravo esta muy bien encausado, debido a que existe vegetación en zonas de inundación sobre todo en el Carrizo que protege los margenes de la erosiones.

Boone González, destacó que los cambios son mínimos, pero no existen problemáticas territoriales.

 Agustín Boone González,representante de la CILA.
Agustín Boone González,representante de la CILA.