Día del Niño… celebración con oscuro y mortal origen

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CIUDAD DE MÉXICO.- Sin importar si cae entre semana o fin de semana cada 30 de abril los reyes del hogar, los niños, son apapachados por cada uno de sus familiares, pero usted sabe… ¿por qué celebramos el Día del Niño?

Con el asesinato de millones de infantes durante la primera Guerra Mundial diversos activistas se unieron para exigir la protección de los niños y niñas.

La británica Eglantyne Jebb, a través de su fundación “Save the Children” o en español “Salvemos a los Niños” impulsó el movimiento para trabajar en favor de los infantes que perdieron todo a causa de la guerra.

Con el paso de los años la lucha por el derecho de los niños, tanto de la británica como de más activistas, desembocó que en el año de 1959 la Organización de las Naciones Unidas, la ONU, declarara el 20 de noviembre como “El Día del Niño”.

Para cuando la ONU declaró esta celebración, en México ya se festejaba a los infantes.

En los archivos históricos se establece que a partir del año 1916 en Tantoyuca, Veracruz, se declaró el ocho de mayo como el “Día del Niño”.

Pero tan sólo, ocho años después en 1924 el ex presidente de la República, Álvaro Obregón y el ex ministro de Educación, José Vasconcelos cambiaron la fecha al 30 de abril esto al firmar ante las Naciones Unidas la “Declaración de Ginebra”, la cual decreta velar por el bienestar de la infancia.

México decidió no establecer el 20 de noviembre como “el Día del Niño”, por que ese día se conmemora la Revolución Mexicana.

En la Constitución Mexicana, por medio de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, se establecen 20 derechos para los infantes; los más importantes son los siguientes:

Derecho a la vida: Esto significa que todo niño tiene derecho a no ser asesinado, a sobrevivir y a crecer en condiciones óptimas.

Derecho a la identidad: Todo niño tiene derecho a tener nombre y apellido, nacionalidad y a saber quiénes son sus padres.

Derecho a la educación: los infantes deben recibir una educación pública y gratuita.

Derecho a la alimentación: Ningún niño debe pasar hambre, sin embargo, el organismo “El proyecto del hambre” asegura que cada 10 segundos muere una niña o un niño por causas relacionadas con la desnutrición.

Derecho a la salud: Los niños deben ser protegidos de las enfermedades.

Derecho a la protección: Ningún niño debe ser víctima maltrato, discriminación y explotación.

Con juguetes o fiestas sea cual sea la manera que desee festejar a los niños lo más importante en no desistir de la lucha y proteger cada uno de sus derechos.

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