El exaspirante a la presidencia de EEUU Marco Rubio confirmó este miércoles que buscará su reelección como senador por Florida después de su sonoro fracaso en las primarias republicanas, poniendo fin así a semanas de especulaciones sobre su posible candidatura.

“He decidido buscar la reelección en el Senado de Estados Unidos”, dijo Rubio en un comunicado, en el que citó “el poder constitucional para actuar como control y balance de los excesos de un presidente” para justificar su decisión.

El senador de origen cubano consideró que, gane quien gane las elecciones presidenciales de noviembre, “hay razones para preocuparse”. “Con Hillary Clinton tendríamos cuatro años más de la misma política económica fallida”, dijo el exaspirante presidencial. Pero “la perspectiva de una presidencia de (Donald) Trump también es preocupante”.

Algunos de los comentarios del magnate, “especialmente en lo que refiere a las mujeres y las minorías, no son sólo ofensivos, sino inaceptables”. “Si es elegido, necesitaremos senadores dispuestos a alentarlo en la dirección correcta y, si es necesario, enfrentarse a él”, añadió.

Su anterior competidor en la contienda republicana, el senador ultraconservador Ted Cruz, dio su total apoyo a Marco Rubio. “Marco es un amigo y a ha sido un aliado en muchas batallas que hemos peleado juntos en el Senado”, escribió Cruz en un comunicado. “Me alegra apoyarlo en su búsqueda de la reelección”. “En estos tiempos de grandes desafíos, necesitamos líderes fuertes en el Senado”, agregó Cruz.

Tres meses atrás, Rubio renunció a buscar la candidatura republicana en la carrera a la Casa Blanca debido al inesperado y contundente ascenso de Donald Trump.

El partido Republicano tiene actualmente el control del Senado, pero teme perderlo en las elecciones presidenciales del 8 de noviembre.

El anuncio del senador llega después de que la Universidad Quinnipiac divulgara una encuesta este miércoles según la cual Rubio es el único republicano con la posibilidad de ganar este escaño en el Senado frente a sus contendientes demócratas, Patrick Murphy y Alan Grayson.

La encuesta muestra que Rubio ganaría con el 47% de los votos frente a un 40% de Murphy, mientras que a Grayson lo vencería por 48%-40%.

Los dos últimos rivales del partido republicano en tirar la toalla frente al paso victorioso de Trump fueron Ted Cruz y el gobernador de Ohio, John Kasich, quienes quedaron a un lado del camino a inicios de mayo.