CIUDAD VICTORIA.- Desde que comenzó el año, el precio de la gasolina no ha dejado de aumentar. Este incremento gradual pero constante de los combustibles ha impactado la actividad de diferentes sectores económicos y por supuesto, en la economía familiar.
En lo que va del mes de enero las gasolinas han subido de 2 a 7 centavos por día, en la zona sur de Tamaulipas actualmente se vende la Magna en $16.41 el litro, la Premium en $18.09, y el diesel en $17.40, de acuerdo con datos de la Comisión Reguladora de Energía.
Mientras que en Ciudad Victoria la Magna se vende en $17.06 y la Premium en $18.62 y el diésel en $17.97, en Reynosa por ser frontera se vende la gasolina Magna en $13.19, la Premium en $15.86 y el diésel en $18.09, y en Matamoros el precio es de $13.19, el diésel en $18.09, y la Premium en $15.86.
La posibilidad de que la gasolina supere los 20 pesos el litro está a la vuelta de la esquina, si los precios siguen subiendo cada día, comentó Rogelio Cogco, Doctor en Economía y catedrático de la Universidad Autónoma de Tamaulipas.
“Si esa tendencia sigue en 2018 tendremos un aumento del 40 a 50% del precio y el riesgo es que llegue a 22 pesos, porque no hay un control, y tampoco mecanismos para tener una ganancia gradual o que haya una reducción de los impuestos”.
Para el comercio los efectos ya se han empezado a sentir con una notable baja en sus ventas, que lo atribuyen a este microgasolinazo.
“Las ventas han caído un 20% como consecuencia de que todo ha subido de precio y es poca la liquidez que le queda a la gente, están por subir los pasajes, ojalá y no lo hagan”, dijo Eduardo Hernández, presidente de la Asociación Regional de Comerciantes e Industriales Mexicanos.
Por el momento están aguantando con bajas utilidades para no incrementar los precios.
“Lamentablemente es en los fletes donde nos está pegando, al pedir la mercancía ese aumento del 5 o 10% del flete va directamente al costo del artículo, aunque tratamos de no subirlo directo y absorber un poco esa alza”, comentó Hernández.
Por su parte, el sector transportista estará anunciando un incremento en los fletes en los siguientes meses por esta razón.
“El alza de los combustibles impacta a la economía de todos, y al transporte de carga, esperamos que se junte varios aumentos para hablar con los clientes y ajustar tarifas”, dijo Jesús Sandoval, delegado de Conatram en la zona sur.
Comentó que todos los días sube 4 o 6 centavos el diésel, y en un mes o dos se junta un porcentaje significativo en el costo del combustible, por lo que empezaran a dialogar con el cliente.
“Algunos entienden y otros se ponen renuentes, pero tienen que acceder porque el transporte es parte de la economía de México”.
Anunció que contemplan que a finales de febrero empiece la negociación del aumento en los fletes.
“Más del 40% de aumento en lo que va del sexenio es lo que ha subido el diésel, que es el combustible que usamos en el sector transporte, no podemos subir a la par de este aumento, por ello tendremos que analizarlo, trabajamos con austeridad para que no desaparezca la industria, no sólo es el diésel, sino las llantas, las refacciones y otras cosas, tenemos que hacer un análisis para saber hasta cuanto podemos aumentar el flete”.
En México el líder nacional está sobre el tema, haciendo ver a Hacienda la situación en la que está el sector transportista, mencionó Sandoval.
“Esta alza gradual, no es más que otro sistema para aumentar el costo, nosotros estamos calmados y aguantando a que esto funcione, pero si ya dejamos de funcionar nosotros en automático nos paramos y paramos el país, porque el 80% de la carga doméstica se transporta vía terrestre, los pequeños, y medianos trasportistas movemos esa carga y solo el porcentaje más bajo se mueve por avión y barco”.
Advirtió el líder de Conatram que en el sur de Tamaulipas la representación de este gremio es importante con unos 200 socios, además de la Canacar, juntos con otras organizaciones mueven alrededor de mil camiones al día que transportan mercancía al puerto de Altamira.
El impacto en vivienda y obras
En el caso de la construcción, el combustible es un insumo prioritario para la actividad y tendrá efecto en el costo final de las obras.
“Lo que se suma al aumento de los materiales, pareciera que empieza el año y todo mundo dice que hay que subirle a las cosas, si bien es cierto, hay una inflación alta, y aumentos que no tienen justificación y casos como el concreto es el más representativo ya que las empresas concreteras se quedan sin alternativa en el momento en que les aumenta el cemento, además del PVC, material eléctrico, de banco, varilla, y el cemento, en fin hay una escalada en general en los insumos de la obra”, señaló Jesús Abud, presidente de la Cámara de la Construcción en Tamaulipas.
El efecto inmediato es que habrá menos obra este año, porque el volumen de obra previsto para hacer se verá reducido, debido a que no alcanza para hacer la misma cantidad, explicó el líder de los constructores que esta es la consecuencia primaria de esos aumentos sin que medie un proceso de regulación.
“También se verá reflejado en el costo final de las casas y las obras públicas y privadas que se construyan, al final lo que sucede es que en el estudio de mercado se consideran precios que ahora están vigentes y eso hace que la obra se incremente al final, por ende tiene que ser más costoso eso impacta en el precio de las viviendas por ejemplo”.
¿Qué hace a la gasolina más cara?
México pasó de ser el décimo país exportador de gasolina a ser un importador de gasolina, actualmente importa entre el 30 y el 40% de las gasolinas que se consumen en el país, lo hace a precios internacionales, porque el costo de los combustibles está directamente ligado a los precios del petróleo, y por ello cualquier cambio en el petróleo repercute en la gasolina.
Esos pequeños ajustes diarios, estos microgasolinazos se generan en medio de la liberación de los precios que empezó en México desde el pasado 30 de noviembre de 2017.
“El problema interno es que aparte de cómo se determina el precio de la gasolina, está el IEPS, la gasolina es un producto que afecta todas las actividades económicas, cuyo aumento se traslada a la economía de todos tengas o no carro, es un producto que esta doblemente gravado, el gobierno cobra por una parte el IVA del 16% y el IEPS que se calcula es entre el 38 y el 40%”, explicó el Dr. Rogelio Cogco.
Del precio real de la gasolina se le incrementa el 50% por impuestos, eso es lo que pagan en México los consumidores por gasolina donde el 50% del precio es de impuestos.
“El daño a la economía en general de las familias y productores está siendo generado por esta política fiscal. Aunque la Secretaría de Hacienda diga que no hay gasolinazo, esas fuertes presiones en el incremento son una realidad, y la Comisión Reguladora de Energía no tiene con esta apertura de gasolinas como controlar los precios”.
Explicó que se deja a la gasolinera a que den el precio, la realidad es que las gasolineras sólo están ganado un incremento marginal, porque el que se llevan las grandes ganancias es el gobierno.
“El impuesto es en base al aumento, si alguien da a 20 pesos el litro en función a ese precio es el impuesto, al gobierno le conviene que suba y se hace de la vista gorda porque así cobra más impuesto, entramos en una espiral que tiene que ver con aspectos de especulación, veremos hasta dónde se revienta la cuerda, no hay un contrapeso y ningún sindicato de consumidores que diga ya no vamos a comprar o una organización civil que diga ya basta, tampoco algún organismo nacional se ha pronunciado en contra, lo mismo pasa con la energía eléctrica”.
El economista pronosticó que este aumento de enero va a repercutir en los próximos meses, lo que pone en riesgo la competitividad de las industrias también, ya que encarece toda la cadena de productividad.
“Es un fenómeno al que poca gente le presta atención y que puede dañar a la economía a largo plazo, dicen que son centavos y no pasa nada pero es diario y al terminar el año el aumento será del 40 o 50%”.
Sube gasolina 100% en 10 años
El costo de la gasolina en los últimos 10 años se ha incrementado en un 100%, en enero de 2010 la Magna se vendía en $7.88, la Premium en 9.66 y el diésel en $7.97, para enero de 2016 la gasolina se vendía en $13.16 Magna , la Premium en $13.98, y el Diésel en %13.77, ya en enero de 2017 se vendió en $15.99, la Premium $17.79 y el diésel en $17.05, para enero de 2018 la gasolina sigue subiendo de precio cada día.
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