Hoy se aprobó la construcción de dos obras que se realizarán en el Puente Del Comercio Mundial con el objetivo de tener mayor competitividad. La primera de ellas es la edificación de una estación de bomberos y la segunda un andén para la revisión de los vehículos que transportan residuos peligrosos. Esto se acordó en una junta que se realizó en el anexo de presidencia, donde se reunieron directivos de diferentes secretarías, además de autoridades municipales y del fideicomiso del Puente Internacional III.

El andén de revisión contará con tanques en el subsuelo para almacenar los derrames y generará una inversión de 13 millones de pesos, mientras que la sub estación de bomberos y módulo de emergencias tendrá una inversión de 16 millones de pesos.

El fideicomiso del puente Internacional III recibió un oficio por parte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) en donde se destacaban los requisitos que solicitó el Servicio de Administración de Tributaria (SAT) referente al cruce de materiales peligrosos.

El ingeniero Rubén Bazán Ancira, presidente suplente, destacó que se han cumplido con todos los requisitos que solicitaban las secretarías implicadas, tema en el que se trabajó en los últimos tres años, por lo que consideran que este fue el último paso para lograrlo.

La construcción de estas obras se realizará en un plazo de tres o cuatro meses, lo que dependerá de los tiempos que conlleve la  licitación, aunado al cambio de gobierno municipal  y estatal, lo que  puede retrasar un poco las licitaciones, pero se espera que para los meses de marzo o abril ya se cuenten con las instalaciones al 100 por ciento, señaló Bazán Ancira.

El alcalde suplente también expresó que el puente internacional III será más competitivo, lo que ayudará a que el tráfico por la aduana de Nuevo Laredo incremente, situación que beneficiaría al gobierno municipal ya que tendría acceso a mayores fondos.

Para llevar a cabo estas obras se coordinaron la Secretaría de Relaciones Exteriores, el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales, el Servicio de Administración Tributaria, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, la Comisión Nacional del Agua además de personal del fideicomiso y autoridades municipales.

“Queremos que esta aduana siga siendo la más grande de México”, finalizó el ingeniero Rubén Bazán.