NUEVO LAREDO.-Existe preocupación en el sector industrial ante la próxima llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos, además de otros factores que afectan como el aumento a la gasolina.
El secretario de desarrollo económico municipal, Francisco Javier Solís, dijo que el panorama es “adverso, bastante retador”, pero lo que se requiere esperar, y posiblemente para junio ya se tendrá un diagnóstico de la situación.
“Aquí lo que necesitamos es tiempo real para ver lo que van a ser las nuevas reglas del juego”, comentó.
“(Los industriales) están muy preocupados, sobre todo aquellas empresas que ya tienen años operando en México y bajo cierto régimen, que se han ido adaptando a los cambios que han sufrido los programas por parte de la Secretaría de Hacienda, por el SAT, Secretaría de Economía, pero no por un cambio que puede ser rotundo o mucho muy grande por parte del gobierno norteamericano”, expresó Solís.
El funcionario agregó que están ajustando los programas y planes que ya tenían, y se dedicarán a trabajar en la promoción sólo en los mercados que presentan mayor oportunidad de que la inversión pueda llegar a la ciudad.
“Estamos ajustando los programas y planes que ya teníamos. Vamos a tener una serie de juntas esta semana para definir qué proyectos se construirán y cuáles vamos a tener que abortar.
“Desistir un poquito por el momento mientras no sean las reglas claras, desistir de insistir en el mercado norteamericano”, mencionó.
Pese a esto se tiene estimado que el parque industrial El Progreso no se vea afectado, y que se mantenga el mismo interés por las empresas con las cuales ya tuvieron acercamiento para promocionar la ciudad como un buen punto para inversión.
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