Tranquila, seria, con peinado y color de cabello distintos, la diputada local que asistió a la apertura del segundo periodo de sesiones del Congreso de Sinaloa, Lucero Guadalupe Sánchez, guardó silencio sobre el juicio de desafuero iniciado en su contra.

La legisladora, quien enfrenta una acusación de presuntos vínculos con Joaquín “El Chapo” Guzmán, volvió a ocupar una curul en el área destinada a la fracción priísta, como sucedió en la última sesión del Legislativo.

A la hora prevista por el reglamento, ocupó su nueva curul, en virtud de que el pasado 19 de enero presentó por escrito su separación de la bancada de Acción Nacional, ante las presiones ejercidas por figuras nacionales panistas tras divulgarse que el 4 de septiembre pasado visitó a “El Chapo” en el penal de máxima seguridad de El Altiplano.

En un breve encuentro con los medios al término de la ceremonia, declinó hacer comentarios sobre el juicio que enfrenta, por recomendación de sus asesores legales.

No obstante, dijo que seguirá con sus actividades parlamentarias, puesto que ya dio, por escrito, sus argumentos a la Cámara de Diputados federal sobre las imputaciones de la Procuraduría General de la República (PGR) en su contra.

Lucero Guadalupe Sánchez fue detenida por agentes federales el pasado 20 de enero, pero fue puesta en libertad tras permanecer varias horas retenida en la Ciudad de México. Según las investigaciones, fue identificada como la mujer que, ingresó a El Altiplano con documentación apócrifa, en una visita a Joaquín Guzmán Loera.

El 25 de marzo, el presidente de la Sección Instructora de la Cámara de Diputados, Ricardo Ramírez, aseguró que el juicio de procedencia o desafuero de la legisladora es procedente, sin importar si la acusación que hace la PGR está basada en un delito grave o no.

Dijo que hay una conducta que se indaga para ver si es posible quitarle la inmunidad a la legisladora y el Ministerio Público pueda ejercitar la acción penal en su contra.

Tras entregar a la Sección Instructora de la Cámara de Diputados la respuesta de Sánchez, Rubén Tamayo, su abogado, afirmó que su clienta presentó un escrito en el que se declara inocente y dijo que el delito por el que se le acusa no es grave y no procede juicio de desafuero.

Asimismo, argumentó que ve tintes políticos para desaforar a la diputada, debido a que hay otras solicitudes de desafuero contra ella, pero primero se le está dando celeridad a su expediente.