La tenista alemana Angelique Kerber se proclama campeona del Abierto de Australia, tras lograr imponerse a la estadounidense Serena Williams quien es la número 1 en el ranking y quien lucía como favorita para llevarse la victoria.

El duelo tuvo una duración de dos horas y ocho minutos, en donde los scores marcaron 6-4, 3-6 y 6-4, inclinándose del lado de la tenista teutona.

Serena se mostro errática pues tenía la presión de ser la favorita además de estar disputando coronarse por vigésima segunda ocasión, por ello presento 23 errores en la primera manga del juego, mientras que su oponente solo erro en tres ocasiones.

Kerber a partir del lunes lucirá como número dos en el ranking.