ECUADOR.- El gobierno de Ecuador desató tensiones diplomáticas al irrumpir en la embajada mexicana en Quito para detener al exvicepresidente Jorge Glas, quien enfrenta condenas por corrupción.
Por su parte, la canciller Gabriela Sommerfeld afirmó que la medida fue tomada tras agotar el diálogo con México, argumentando que Glas estaba en riesgo de fuga inminente.
También enfatizó que “la decisión del presidente de la República fue tomada ante un riesgo real” de evasión de Jorge Glas, y “para Ecuador ningún delincuente puede ser considerado para el asilo” político.
Sommerfeld rechazó las acusaciones de persecución política, señalando que “ningún delincuente puede ser considerado perseguido político” y Glas debía enfrentar la justicia por sus delitos.
Señaló además que “México debió cumplir con las obligaciones contenidas en la Convención de las Naciones Unidas contra la corrupción de 2002 y la Convención Interamericana contra la Corrupción de 1996. Haciendo efectivo el deber de cooperar para prevenir y combatir los actos de corrupción en el ejercicio de las funciones públicas”.
Glas, quien ha negado los cargos y se declara víctima de persecución política por ser correísta, fue recibido en la embajada mexicana como huésped, lo que, según el gobierno ecuatoriano, contribuyó a su evasión de las autoridades judiciales.
La canciller subrayó que la intervención ecuatoriana se realizó ante un “riesgo real” de que Glas eludiera la justicia. Asimismo, Ecuador instó a México a cumplir con los compromisos internacionales en la lucha contra la corrupción.
El exvicepresidente fue trasladado bajo fuerte seguridad hacia el aeropuerto de Quito y luego embarcado con destino a Guayaquil, donde será recluido en el Centro de Privación de Libertad Guayas 3. El Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores confirmó el traslado.
Opositora ecuatoriana se lanza contra el presidente y le pide que renuncie
Pese a la postura del gobierno actual de Ecuador, la excandidata presidencial, Luisa González, se pronunció en contra de las acciones tomadas por el presidente Daniel Noboa y su administración que desataron “el repudio de la comunidad internacional”.
“Lo hecho por el gobierno de #ElNuevoEcuador ha recibido EL REPUDIO DE LA COMUNIDAD INTERNACIONAL, organizaciones, Estados, partidos políticos, congresistas, etc. ?RENUNCIE antes de acabar de destrozar al país”, dijo la excandidata presidencial.
Previamente, Noboa había señalado que “la gran mayoría del Ecuador decidió que yo esté aquí. La agenda del Ecuador la impone la mayoría, no un pequeño grupo de relajosos”; mientras, 51 legisladores de Revolución Ciudadana pasarán a la oposición en la Asamblea Nacional de Ecuador.
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