Las intensas lluvias de las bandas nubosas de la tormenta tropical “Earl”, dejaron el fin de semana una estela de muerte en los estados de Puebla, Veracruz e Hidalgo, donde se contabilizaron 40 muertos; 18 eran menores de edad.

Esta cifra supera los 33 fallecimientos que han sido reportados entre 2014 y 2015 en el país, durante el paso de 10 huracanes.

Si bien las intensas lluvias del fin de semana no generaron daños graves en infraestructura, sí provocaron deslaves y desgajamientos de cerros en comunidades rurales y apartadas que dejaron —en las tres entidades— el saldo fatal, de acuerdo con información de los gobiernos estatales.

El presidente Enrique Peña Nieto, en su cuenta de Twitter, escribió: “Mis sentidas condolencias a los familiares y seres queridos de las personas que fallecieron por el paso de Earl”.

Dijo que en coordinación con las administraciones estatales, el gobierno federal seguirá apoyando a las personas y comunidades afectadas.

En Puebla se tiene el mayor registro de víctimas con 28 en los municipios de Huachinango y Tlaola; seguido de Veracruz con 1q en las regiones centro y norte; e Hidalgo con uno. En casi la totalidad de los casos, los muertos eran de escasos recursos.

La Secretaría de la Defensa Nacional activó su Plan DN-III de ayuda a la población y colaboró en las penosas tareas de rescatar los cuerpos sepultados por miles de toneladas de lodo; en tanto, los gobiernos de Puebla y Veracruz solicitaron a la Secretaría de Gobernación declaratorias de Emergencia para atender a los damnificados y deudos.

En respuesta, Gobernación declaró zona de emergencia en tres municipios poblanos.

Luis Felipe Puente, coordinador de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, confirmó la muerte de 28 personas en Puebla y 10 en Veracruz, mientras que en Hidalgo, se dio conocer el fallecimiento de un joven de 15 años de edad, y por la noche el gobernador de Veracruz, Javier Duarte, en su cuenta de Twitter informó de otro fallecimiento en la entidad.

En Puebla, tras largas horas de incertidumbre, autoridades estatales informaron de la muerte de 28 personas en la Sierra Norte, donde las lluvias generaron deslaves y desgajamientos de cerros en colonias populares y comunidades rurales.

La región más afectada fue el municipio de Huauchinango, donde se presentó la mayor precipitación de agua de la que se tenga registro: 265.5 milímetros por metro cuadrado durante 24 horas, que significa casi el total de precipitaciones en un mes.

En la cabecera municipal se registraron deslaves sobre viviendas en las colonias la Joya, Guadalupe, Aurora y la Cumbre que dejaron el fallecimiento de al menos 13 personas (siete menores y seis adultos).

En Xaltepec en el mismo municipio, se desgajó un cerro sobre la comunidad, causando la muerte de 11 personas (ocho menores y tres adultos) , y en la carretera estatal de acceso a Huauchinango, el desgajamiento de un cerro arrastró a dos autobuses de transporte público, en uno de los incidentes murió un adulto.

En el municipio de Tlaola, deslaves también cubrieron varias viviendas con tres personas fallecidas.

El gobernador Rafael Moreno Valle acudió a la zona de desastre para coordinar los trabajos de rescate y ayuda a la población afectada.

En Veracruz, el fin de semana provocó 11 muertos en los municipios de Coscomatepec y Tequila, en la zona montañosa central; y en Huayacocotla, asentado en la huasteca, en el norte del estado.

En Hidalgo, un desgajamiento de un cerro en la comunidad de los González del municipio de Nicolás Flores atrapó a cuatro personas que habían acudido a una fiesta de XV años; uno de ellos pereció debido a las heridas, un joven de 15 años de edad.