Transportistas anunciaron que de no restablecerse el abasto de combustibles en las próximas horas, a partir del primer minuto del 28 de diciembre saldrán a las carreteras para interceptar pipas de Pemex y si es necesario incendiarlas, hasta que la paraestatal entienda que no puede jugar de manera tan perversa con la economía de los mexicanos, al provocar un encarecimiento controlado de los hidrocarburos, ante la indolencia del presidente Peña Nieto, senadores de la República, diputados y gobernadores.
Según fuentes que hicieron contacto con códigosanluis.com, Pemex mantiene almacenadas las gasolinas y el diesel, provocando la escasez en los expendios al público, provocando con ello caos e irritación social con el único objetivo de agenciarse, por lo menos, 5 mil millones de pesos aprovechando el aumento que sufrirán los combustibles el primer minuto de 2017.
Los transportistas advirtieron que el impacto económico de esta arbitraria medida es de gran impacto para los mexicanos y que en el caso de San Luis Potosí será todavía más grave, debido a que se trata de un estado que es paso obligado para las mercancías que van al norte del país a los puertos de Tampico y Manzanillo, así como al occidente, Bajío y centro de México.
Dijeron que la población está dispuesta a salir de sus casas y que cuentan con el apoyo de ciudadanos cansados de tanto abuso y saqueo a la nación, que hacen lo mismo priistas, panistas y perredistas.
Según estas advertencias, los transportistas estarían al pendiente del paso de las pipas para poder interceptarlas en cruceros y carreteras para detenerlas, bajar al conductor y en seguida incendiarlas.
La población potosina cada vez entra más en pánico y la crisis de combustible afecta ya a todos los sectores de la sociedad.
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