NUEVO LAREDO.- Filas de ocho y nueve kilómetros así como esperas de hasta seis y ocho horas, fueron las que se registraron este martes en los accesos que conducen hacia el puente internacional número III, en donde desde temprana hora agentes de la Dirección de Tránsito se hicieron presentes, para ordenar el intenso flujo vehicular.
Uno de los agentes adscritos al sitio, comentó que durante la mañana la fila llegó hasta el área de Setasa, lo que ocasionó que muchos traileros en su desesperación, se metían en contra sobre los carriles de sur a norte de la carretera a Piedras Negras.
José Antonio García Fuentes, dirigente de la Unión Fronteriza de Transfers (UFO), llamó a las autoridades estatales a coordinarse con su contraparte norteamericana, para agilizar el cruce de los tráilers, ya que la modificación de horarios así como la desviación del tráfico hacia Colombia, poco o nada ha ayudado en que los cruces sean más ágiles.
García Fuentes dijo que en el área los operadores requieren de sanitarios portátiles, debido a que no los hay y eso complica su estancia de varias horas en el sitio, además de que pidió al gobierno estatal, a que intervenga para buscar una solución al problema.
Las largas filas y extensos tiempos de espera, se originaron la semana pasada, debido a la reducción de personal por parte de la Aduana norteamericana, la cual envió 750 agentes de la Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés) a otros puertos fronterizos, debido al arribo de centroamericanos a diferentes fronteras de Estados Unidos.
Por este motivo, se han abierto pocos módulos de lado norteamericano del puente III, lo que ha originado lentitud en los cruces, además de que los transfers deben esperar muchas horas para poder hacer una entrega y sólo alcanzan a realizar dos operaciones diarias, es decir llevar una caja con mercancía y volver.
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