NAUCALPAN.- Las autoridades del Estado de México desconocen el paradero del “justiciero” que el pasado domingo por la noche mató a balazos a dos delincuentes a bordo de una unidad del transporte público, así como a una pasajera que hoy se sabe tenía cuatro meses de embarazo.
Tras lo anterior, la Procuraduría mexiquense perdió a tres testigos importantes que hubieran proporcionado datos sobre el “justiciero”, ya que el operador de la unidad dijo que sólo escuchó los disparos, pero nunca volteó a ver qué era lo que sucedía.
Del resto de los pasajeros, las autoridades señalaron que tras llegar al paradero de Cuatro Caminos descendieron de la unidad y no se han presentado a rendir su declaración en torno al triple homicidio.
Sobre la mujer que viajaba en el asiento del copiloto, el cuerpo fue entregado a su madre, quien relató que venía de trabajar y se dirigía a su casa en la delegación Iztapalapa, que se llamaba Gaby y que tenía cuatro meses de embarazo.
La bala le entró por un costado de la espalda y lesionó órganos vitales, lo que impidió que médicos del Hospital de Traumatología de Lomas Verdes pudieran salvarle la vida.
Respecto a la aparición de los denominados “justicieros”, el secretario de Gobierno mexiquense, José Manzur Quiroga, aceptó que este fenómeno se debe a que la gente se siente desprotegida y en la necesidad de cuidar sus pertenencias. Destacó que no se debe hacer justicia por propia mano, pues se comete un delito que será castigado.
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