NUEVO LAREDO.-La tarde de este martes, autoridades estadounidenses regresaron a México por el Puente Internacional II “Juárez Lincoln” de Nuevo Laredo, a más de 180 migrantes, en su mayoría centroamericanos entre mujeres, hombres y niños.
La mayoría son extranjeros que fueron regresados a México luego de que solicitaron asilo en Estados Unidos, y esperarán en tierras mexicanas la fecha de su cita en Estados Unidos para obtener una respuesta a su petición de ser aceptados para residir en EU.
Gran parte de ellos cruzaron hacia Estados Unidos de forma ilegal a través del río Bravo y una vez que fueron asegurados por la Patrulla Fronteriza, solicitaron asilo político en el vecino país; otros permanecían en albergues en México y fueron llamados a hacer su solicitud.
Al ser devueltos a México, gran parte de estos migrantes centroamericanos hay ciudadanos de Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala, quienes portaba documentos con cita para una audiencia en el mes de septiembre, tiempo en el que el gobierno de Estados Unidos analizará su solicitud para determinar si los acepta o no para otorgarles un documento de estancia legal en la Unión Americana.
Entre las personas retornadas este martes por el Puente Internacional II, también se encuentra un pequeño grupo de mexicanos que fueron deportados al ser víctimas de las redadas que se han realizado en Estados Unidos y que tenían viviendo y trabajando de manera indocumentada en aquel país de 5 a 20 años.
Personal del Instituto Nacional de Migración los recibió en el Puente y censó a los extranjeros para otorgarles el permiso correspondiente para su estancia temporal en México. Posteriormente fueron enviados en autobús a la ciudad de Monterrey, donde esperarán la fecha para presentarse en su audiencia en Estados Unidos, mientras tanto, si así lo desean, podrán trabajar para sostenerse económicamente.
Solamente los migrantes extranjeros que ya estaban en algún albergue de Nuevo Laredo antes de cruzar hacia Estados Unidos, podrán quedarse en esta frontera a esperar la respuesta a su solicitud de asilo que hicieron a EU.
A su arribo a esta frontera, algunos migrantes comentaron que en Estados Unidos se encontraban en centros de detención, los cuales se encontraban saturados y no recibían buen trato.
Previamente, el lunes fue retornado a Nuevo Laredo otro grupo de extranjeros. El presidente municipal Enrique Rivas informó que en total fueron 118, de los cuales 50 se quedaron en Nuevo Laredo ya que son de los que ya estaban varados en esta frontera, mientras que los 68 restantes fueron trasladados a otras fronteras.
Aseguró que el Programa de Protección al Migrante, funciona como se esperaba y el retorno de los migrantes extranjeros, de Estados Unidos a México, se está dando por los puertos donde cruzaron, en los que continuarán el proceso de su solicitud de ingreso a territorio estadounidense.
“Hay 50 migrantes que estaban ya aquí en la ciudad, y que hicieron una solicitud al gobierno de Estados Unidos, fueron capturados y procesados en el trabajo que realiza CBP (Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos), posteriormente nos retornaron 118 migrantes, y de estos, solamente los 50 que ya estaban en Nuevo Laredo se quedaron aquí, los demás retornaron a las fronteras por donde cruzaron”, dijo Rivas Cuéllar.
En Nuevo Laredo hay actualmente alrededor de 2 mil 800 migrantes en los albergues, y en promedio, una vez por semana Estados Unidos informa a las autoridades mexicanas para que envíen personas a hacer su solicitud de asilo. En promedio llama a unas 20, aunque este número puede variar, ya que las autoridades americanas deciden cuántas les pueden enviar. Cada albergue envía un número de personas, quienes luego de hacer el trámite regresan a México, al mismo albergue en que se encontraban, donde esperarán la fecha de su cita para audiencia en Estado Unidos.
El hondureño Wilfredo Álvarez cruzó por Miguel Alemán el pasado 11 de julio y fue detenido por migración americana, de ahí fue trasladado a San Antonio, Texas y posteriormente a Laredo, Texas, para ser devuelto a México, en donde tendrá que esperar su cita con el juez hasta el mes de septiembre para ver si es apto para asilo en Estados Unidos. La misma situación la vive Juan Antonio Espinoza, migrante salvadoreño de 18 años de edad.
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