CIUDAD DE MÉXICO.- Tal parece ser que estamos viendo al Necaxa de hace 15 años. Un equipo con orden, garra, oficio y más que nada, oportunista. Esa fue la impresión que dio en cuartos de final ante Pachuca.
Los Rayos sobrevivieron un vendaval de los Tuzos en los dos juegos de Liguilla: 31 remates en contra (15 al arco), 23 oportunidades creadas y 321 toques en ataque permitidos. Solo León superó a los Tuzos en esos departamentos. Necaxa dejó en cero a la mejor ofensiva de la temporada en el partido decisivo.
Fue acertado cuando lo necesitaba. Y basado al plantel que tiene, Necaxa jugó a lo que podía.
Necaxa se convirtió en el primer benjamín en eliminar al campeón vigente en torneos cortos. Los Rayos buscan ser el primer recién ascendido desde Atlético Celaya (1995-96) en jugar la final, pero para ello, se toparán en semifinales con el América.
Unión en equipo y brillo de sus estrellas
Necaxa tiene a dos figuras que ya se cotizan en México. Edson Puch se convirtió en la sensación del torneo, marcando nueve goles, siendo el primer necaxista en llegar a nueve goles en una temporada de Liga MX desde Hugo Rodallega (Apertura 2008). Puch estaba a un partido de igualar la racha histórica del Necaxa de partidos anotando en liga con seis.
El arquero Marcelo Barovero se ha encargado de darle solidez a la defensa. Su porcentaje de atajadas de 78.6 por ciento en temporada regular fue el tercero más alto detrás de Federico Filar y Nahuel Guzmán. Solo un arquero tuvo más atajadas en un partido de las últimas nueve liguillas que Barovero (nueve) el domingo.
Pero de los 14 futbolistas que ha jugado al menos 10 partidos esta temporada, siete de ellos fueron parte del club en Ascenso MX, incluyendo Felipe Gallegos, Jesús Isijara y Michel García, quienes llevan más de dos años cada uno jugando con el club. Los tres han creado el 31 por ciento de las oportunidades de gol del club en el Apertura 2016.
El hombre indicado en la banca
Alfonso Sosa busca la revancha en primera como técnico tras un breve paso dirigiendo a U de G. En su primera temporada con Necaxa en Liga MX, el club fue la defensa con más intercepciones en el torneo (328) y la tercera menos goleada con 18 goles. Además, Necaxa enfiló su racha invicta en liga más larga desde 2001 (nueve).
Los Rayos siguen sin perder en casa bajo Sosa y es el único equipo en la historia de los torneos cortos que terminó invicto en casa en su temporada de ascenso. En el Apertura 2016 Necaxa fue el único que no recibió más de 2 goles en un partido.
La ofensiva también respondió. Necaxa tuvo la cuarta mejor efectividad de remates al arco del torneo con 33.8 por ciento y anotando 24 goles, uno más que U de G con Sosa en dos temporadas en el máximo circuito.
Sosa es el único técnico mexicano que resta en la liguilla. Buscaría ser el primer entrenador mexicano campeón desde Miguel Herrera con América en el Clausura 2013.
Jugar sin presión
Ni el aficionado más optimista del Necaxa se imaginaria llegar a esta instancia. Pero el objetivo sigue siendo el mismo: mantener la categoría.
América es el presionado. Es el club grande y está en su temporada de centenario, obligado a derrotar a su ex hermano menor. América ya elimino dos veces a los Rayos en tres enfrentamientos de liguilla, incluyendo la final del Verano 2002. Todo se presta a una final azulcrema.
Pero en 2016 se han rompido todos los pronósticos. Leicester City, Cleveland Cavaliers y hasta los Chicago Bulls salieron campeones en sus respectivos deportes. Entonces, ¿por qué no Necaxa?
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