NUEVO LAREDO.- La falla registrada en los equipos de hemodiálisis de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) 76 con Unidad de Atención Ambulatoria (UMAA) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) del pasado viernes 15 de marzo así como en el área subrogada el lunes 18 de marzo, ocasionó que al menos dos de los 165 pacientes que atienden, fueran hospitalizados; uno de ellos se encuentra grave debido a la situación.
“Tuvimos un problema con el tratamiento del agua, quemándose las dos bombas que tenemos allí en el depósito y eso es imposible en un momento dado para realizar la sesión a los pacientes, lo que nos toca a nosotros es darle la papelería para el subrogado, tenemos un área de subrogación, pero lógico no se les va a dar al momento que se le envía porque tienen que estar programándose en una forma continua, es un área donde también tienen programación y todo eso incomoda al paciente, pero sí deben de recibir su tratamiento”, destacó el coordinador médico de la UMAA, J. Saúl Sandoval Guerra.
Sin embargo fue el lunes alrededor de las 8:00 de la noche que se registró un bloqueo también en las líneas de distribución del agua del área subrogada, por lo que aquellos pacientes que habían sido enviados para recibir el tratamiento, tampoco lo pudieron recibir y fue hasta el martes después de mediodía que se solucionó el problema en ambas áreas, sin embargo dos pacientes ya habían sufrido las consecuencias de no haberse realizado a tiempo la hemodiálisis.
“Recibo una llamada telefónica del encargado que se iba a suspender, porque también tuvieron un taponamiento de su tubería y también eso les generó problemática, no dándose las últimas sesiones allá y entonces a nosotros nos iban a llegar aquí el martes y ya se resolvió el problema en el transcurso del día, nada más quedándose el primer y segundo turno sin sesión y hasta el miércoles ya se restableció bien el servicio aquí con nosotros y en el subrogado nada más fue medio día del martes”, explicó Sandoval.
El Coordinador Médico de la UMAA destacó que el miércoles se restableció el servicio en ambos sitios y que son 165 pacientes repartidos en la clínica y el subrogado; en la clínica reciben los pacientes la sesión de dos a tres veces por semana, en dos turnos desde las 8:00 de la mañana de lunes a viernes y en el área extra hospitalaria, los atienden en tres turnos e incluso hasta el sábado.
“El paciente siempre debe de estar controlado, si no tiene ninguna falla en sus sesiones puede tolerar una sesión sin darse unos días llevando control en la ingesta de líquidos y su alimentación, ellos lo saben bien, desgraciadamente cuando es un periodo largo (…) entonces ahí sí podría haber más problemática, porque ellos tienen acumulación de líquidos y también de sustancias tóxicas”, explicó Sandoval Guerra.
El médico destacó que a pesar de que son hechos aislados, los pacientes deben de llevar un control para evitar complicaciones, que podrían ocasionar decesos.
“Desgraciadamente sí hay decesos por complicaciones que yo mencionaba, y que requieren hospitalización, desgraciadamente sí se ven rebasados en la hospitalización en un momento dado en urgencias en el Hospital de Zona 11”, explicó Sandoval Guerra.
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