EEUU.- Un oso grizzly mató a una ciclista que estaba acampando en Ovando, Montana, Estados Unidos, la mañana del martes pasado.
Leah Davis Lokan, de 65 años, se encontraba haciendo un viaje en bicicleta con su herma y un amigo. Pasaron la noche acampando, cuando durante la madrugada, Leah, que dormía en una tienda de campaña diferente que sus acompañantes, fue arrastrada por un oso.
Al parecer, el oso inicialmente se acercó y despertó a los campistas, que sacaron la comida de sus tiendas y se volvieron a dormir. El oso regresó y atacó, lo que despertó a las personas que viajaban con la víctima, quienes rociaron spray para osos al animal.
“Básicamente, el oso regresó al campamento. Se metió al campamento en un par de ocasiones diferentes”, dijo el alguacil del condado de Powell, Gavin Roselles, cita la agencia AP.
El mismo oso también habría entrado esa noche a un gallinero de la ciudad, según revelaron cámaras de seguridad del negocio afectado, reveló Montana Fish, Wildlife and Parks (FWP), una agencia gubernamental del estado de Montana responsable de proteger la vida silvestre.
El oso habría sido un macho de aproximadamente 181 kilos, al que no se le ha vuelto a ver, pero ya se han colocado trampas para atraparlo.
Las autoridades a su vez dicen que no está claro por qué el oso atacó y hasta los residentes del área se dicen desconcertados, pues aseguran estar acostumbrados a vivir cerca de estos animales, pero éstos nunca se comportan así.
“Generalmente los conflictos entre osos y humanos se deben a la protección de comida o de sus crías o, por encuentros sorpresa en los que el oso se siente amenazado, pero ir a un campamento y atacar a una persona, no es su instinto natural”, dijo Greg Lemon, portavoz de FWP.
(EL SIGLO DE TORREÓN)
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