Nuevo Laredo.- Con tan solo 8 años de edad, Lluvia llegó al IMSS de Nuevo Laredo presentando crisis convulsiva a causa de deshidratación y desnutrición por maltrato infantil ocasionada por su madre.
De acuerdo con Martín Mireles, Director de Salud Municipal, la pequeña estuvo sujeta por varios meses a este maltrato y tenía serias marcas en diversas partes del cuerpo, presentaba desnutrición severa, pues pesaba 13 kilos en lugar de los 30 que debería tener de acuerdo con su edad, y padecía deshidratación.
Dijo que en un principio se pensaba que el padre era quien tenía en estas condiciones a la niña, sin embargo, hubo declaraciones por parte de la madre en donde aceptó que fue ella quien le dio ese trato.
Se dice que la niña es inquieta por lo que su mamá dejó de enviarla a la escuela desde hace dos meses aproximadamente, luego de recibir quejas por parte de las docentes quienes le comentaban que les robaba los alimentos a sus compañeros.
“Esta niña llega con una situación donde el sodio que es un electrolito que regula muchas funciones en el organismo estaba muy alto, y eso muy probablemente haya sido por una deshidratación, lo que le causó una crisis convulsiva ya que el cerebro es muy susceptible a cambios importantes del sodio, del agua y bueno los médicos que la atienden se dan cuenta que no solo tiene un estatus epiléptico si no que viene con una situación muy importante de maltrato”, dijo Mireles.
Lluvia logró estabilizarse después de permanecer entubada por más de medio día recibiendo apoyo ventilatorio durante la terapia.
“Yo siempre digo que trabajar con niños es una maravilla, bendito Dios todo lo que les haces funciona, fue muy bien tratada y diagnosticada a la brevedad, ayer que la fuimos a visitar estaba ya en mejores condiciones a pesar de que no abría los ojitos estaba un poquito más reactiva ya no estaba convulsionando y apenas le iban a iniciar algo de dieta”, destacó.
La denuncia de este caso, fue hecha por los vecinos de la colonia Buenavista, quienes se percataron de la situación y llamaron a las autoridades correspondientes para ser rescatada y fue llevada al IMSS por el padre de la pequeña.
Medicamente lo que sigue para Lluvia es nutrirla con alimentos tolerantes, continuar el monitoreo de la actividad epiléptica en caso de que llegue a presentarse, sin embargo lo más lamentable serán las secuelas emocionales.
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