NUEVO LAREDO.- Con lágrimas en los ojos, Alejandro Ruíz Martínez de 47 años narró la precaria situación en la que viven él, sus cuatro hijos y su esposa embarazada, pues aunque vinieron a Nuevo Laredo en busca de una mejor vida, la realidad fue completamente diferente.
Por más que lucha por salir adelante, su trabajo no le da más que para comprar algo de pan y leche.
Aunque cuenta con un triciclo prestado con el que sale a vender elotes, la ganancia es insuficiente, pues apenas logra sacar 300 pesos para reinvertirlos y así continuar con su labor, sin embargo, lo único que alcanza a comprar para alimentar a su familia son 50 pesos, con los que adquiere algo de pan y un litro de leche, que les ayuda a mitigar el hambre.
“Tenía una camioneta y la vendí porque no tenía nada qué comer, no tengo nada para darles un regalo a los niños, no tengo nada para poder regalarles”, dijo el padre de familia con lágrimas en los ojos.
Originario de San Luis Potosí, Alejandro y su familia viven en una casa abandonada en la colonia Los Olivos I, en calle Distintivos número 1810N, en donde apenas cuentan con lo indispensable para sobrevivir. No tienen ropa abrigadora y menos cobijas para enfrentar las bajas temperaturas que ya se sienten en la ciudad.
El padre de familia caminó una gran distancia para surtirse de gas, para la venta de su producto y lo acompañaba una de sus hijas, de tres años. La pequeña no tenía un suéter para abrigarse y se cubría del frío con una chamarra de su papá, además de que sus pies estaban cubiertos por apenas un par de sandalias muy sencillas y no usaba calcetas.
Alejandro dijo que en su estado natal hay muy poco trabajo y permaneció hasta un año sin poder laborar, por esa razón decidió emigrar a Nuevo Laredo junto con su familia, pero no contó con que aquí tampoco lograría encontrar un empleo con un sueldo suficiente para su hogar.
“Somos pobres, yo no tengo estudios pero si yo tuviera escuela otra cosa sería, estaría en una fábrica, quisiera tener un trabajo para poder mantener a mi familia”, contó desesperado.
Si usted desea ayudar para Alejandro y familia pasen una feliz Navidad, puede apoyarlos con ropa, alimentos, cobijas y un pequeño obsequio para los niños.
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