La Conferencia del Episcopado Mexicano destacó que “los primeros responsables según el derecho positivo y el derecho natural de la educación de sus hijos son los padres de familia”, expresó diversas críticas a los libros de texto de cuarto, quinto y sexto de primaria de ciencias naturales y de formación cívica y ética, así como el libro para las familias de educación preescolar.

En un pronunciamiento sobre el modelo educativo y los libros de texto, los cardenales José Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara y presidente de la CEM, Alberto Suárez Inda, arzobispo de Morelia y responsable de la Dimensión de Pastora Educativa, así como Alfonso Miranda Guardiola, obispo auxiliar de Monterrey y secretario general del organismo episcopal, detallaron que en dichos libros se presenta una información sexual orientada a efectos meramente anatómicos y fisiológicos dejando a un lado lo que compete a una verdadera educación sexual.

Advierten que “los marcos teóricos de los libros de texto más que manifestar la grandeza humana de la relación sexual se reducen a señalar los riesgos de las enfermedades de transmisión sexual, así como el embarazo adolescente”.

Criticaron que en estos libros no se señalen los aspectos básicos sobre la “voluntad, el dominio de las pasiones, la responsabilidad para amar, así como la base característica del amor humano que implica vencer el egoísmo para participar en el don de la vida, compartirla, cuidarla y custodiarla”.

Añaden que en estos textos prevalece una “concepción biológica del ser humano, es decir se reduce a la persona, a su marco meramente biológico”.

La CEM invitó “a todos los padres de familia a revisar puntualmente los libros de sus hijos y hacer un esfuerzo de formación para poder asumir la responsabilidad de ser los primeros educadores de sus hijos”.

Reconoció que en las redes sociales “está circulando mucha información falsa sobre el contenido de los libros de texto”.