CIUDAD DE MÉXICO.- El gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, consideró como “alarmante” la situación que padece el estado, donde se “engrosó” la nómina del gobierno central con militantes del PRI al final de la administración de ex mandatario Egidio Torre.
“Es alarmante que más allá de las afiliaciones partidistas se haya incrementado la nómina en los últimos años, eso hace que un gobierno sea ineficiente y que se gaste de más; peor aún, que se hayan duplicado funciones con fines políticos electorales”, dijo a El Universal.
Esa situación, indicó el gobernador, le cuesta recursos a Tamaulipas que deberían aplicarse a programas sociales y obras.
“Estamos haciendo una auditoría en todas las áreas para asegurarnos que no haya ningún quebranto patrimonial, de estar pagando sueldos de gente que no haya ido a trabajar”, sentenció.
El Universal informó ayer que la nómina del gobierno de Tamulipas, con Egidio Torre (PRI), albergó a al menos 5 mil 368 militantes del PRI (35% del total), por lo que el nuevo gobernador, emanado del PAN, inició una auditoria; de la cuál, expone García, no adelantará nada hasta que concluya.
Ven práctica negativa. Los diputados Federico Döring (PAN) y Jesús Zambrano (PRD) opinaron que el caso de Tamaulipas habla de la falta de alternancia en los estados y de la probable exigencia de ser militante del PRI para acceder o ascender en un cargo público.
Contrario a éstos, el vicecoordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, enfatizó que no es un delito trabajar en un gobierno siendo militante de algún partido y, mucho menos, un requisito para acceder a un puesto público. (El Universal)
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