CAJEME, Sonora.— Ante la sequía extrema que se padece en Cajeme y el Valle del Yaqui, este domingo la feligresía católica implorará a Dios, con una misa en el mirador de la presa Álvaro Obregón, conocida como El Oviachic, para que “mande lluvias”.
El acto religioso será oficiado por monseñor Felipe Pozos Lorenzini, quien llamó a las y los sonorenses a unirse con el poder de la oración. “Todos estamos invitados a asistir y unirnos por este don que tanto se necesita”, se lee en la invitación que circula en redes sociales.
De acuerdo con información del Organismo de Cuenca Noroeste de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), El Oviachic se encuentra a 16.6% de su capacidad.
La falta del líquido pone en riesgo el abasto de agua a las actividades agropecuarias y al consumo humano.
Por sequía, resurge pueblo inundado
En Sonora, los niveles de embalses son tan bajos que ha resurgido el pueblo Buenavista Viejo, que fue inundado en los años 50 para la construcción de la presa.
La sequía ha descubierto los escombros de la iglesia San Carlos Borromeo y un panteón, situación que también ha atraído a turistas, quienes acuden a observar este fenómeno.
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