El gabinete del edil Cuauhtémoc Blanco Bravo volvió a sacudirse este lunes con la renuncia de Samuel Sotelo Salgado, como titular de la Secretaría del Ayuntamiento y en su lugar fue designado Guillermo Arroyo, hasta ayer domingo encargado de la Secretaría de Asuntos Jurídicos de la comuna, un ex defensor legal de la familia Pineda Villa, detenidos en 2009 por su presunta vinculación al cártel de Los Beltrán Leyva.

Samuel Sotelo dijo que su salida del ayuntamiento fue para evitar que su pensión como magistrado en el Tribunal Superior de Justicia resultara afectada. El cambio fue divulgado por Blanco Bravo a través de su cuenta de Twitter.

En los siete meses de gobierno, el gabinete del ex futbolista registra cambios constantes. La Secretaría de Desarrollo Sustentable lleva tres cambios de sus titulares; en Obras Públicas van dos cambios y otras áreas como Seguridad Pública, Desarrollo Social, Desarrollo Económico y el Área Jurídica, suman dos titulares.

Pero el cese de mayor trascendencia ha sido en la Secretaría del ayuntamiento cuyo cargo ocupó Roberto Yáñez Moreno, uno de los principales dirigentes del Partido Socialdemócrata (PSD), el instituto político que colocó en el poder a Blanco Bravo.

A Roberto lo sustituyó el ex magistrado local Samuel Sotelo Salgado pero a menos de un mes de su nombramiento presentó su renuncia, cuyo cargo será ocupado por el abogado Guillermo Arroyo.

Arroyo Cruz tiene fue Subprocurador de Asuntos Contra la Delincuencia Organizada en Morelos y al final de ese cargo litigó asuntos de carácter penal, entre ellos destaca la defensa que realizó a mediados de 2009 a los padres de los hermanos Alberto y Mario Pineda Villa, señalados por la PGR como operadores financieros de los Beltrán Leyva y líderes de la plaza morelense en la primera década del año 2000.

En el clan Pineda Villa también figura María de los Ángeles, esposa del ex edil de Iguala, Guerrero, José Luis Abarca.

En mayo de 2009 la Policía Federal e infantes de la Marina catearon la residencia marcada con el número 298 de la colonia Reforma, distante 100 metros de la casa de gobierno, para detener a los hermanos Pineda Villa, pero encontraron a sus padres.

El sitio fue acordonado por las fuerzas federales y hasta ahí llegó Arroyo Cruz para abogar por los detenidos pero fue rechazado por los agentes especiales.

Luego declaró a la prensa que sus defensos eran objeto de violaciones a sus garantías legales porque les trastocaban el derecho a contar con un abogado durante su aprehensión.

En ese operativo fueron detenidos 13 personas y luego de unos meses en proceso salieron en libertad, en tanto que los hermanos Alberto y Mario Pineda Villa fueron asesinados presuntamente por sicarios del crimen organizado.