Cartas de trabajo, de poder y traducciones de títulos son tan solo algunas de las redacciones que siguen realizando los pocos escribanos de la ciudad y a quienes la tecnología les ha quitado el trabajo casi en su totalidad.
Herculano Montoya continua con esta antigua profesión y lleva medio siglo sobreviviendo de esto y se niega a dejarlo, aunque la gente solicite poco sus servicios.
“Empezamos trabajando en una mesitas que cargábamos y la maquinita y había mucho trabajo, en aquellos tiempos eran giros telegráficos, telegramas, cartas familiares, pero ahorita se cabo”, Herculano Montoya, Escribano.
Los pocos escribanos que quedan aseguran que con la tecnología las personas hacen todo desde la computadora, sin embargo ellos continúan trabajando con su máquina de escribir.
“Pues no mas aquí hay un compañero que tiene computadora y tiene internet es el único, pero nosotros seguimos trabando a la antigua”, añadió El Escribano
Esta profesión data de muchos años atrás y los escribanos más representativos son los de la Plaza Santo Domingo en la ciudad de México, que al igual que muchos de todo el país, se niegan a que su trabajo muera.