El próximo año Nuevo León va encaminado a renovar sus poderes en elecciones estatales. Ante esta situación se pudo hablar con uno de los personajes más controvertidos de la Sultana del Norte, el senador Samuel García.
Con su tono golpeado apuntó que Movimiento Ciudadano (MC) peleará por la gubernatura, con o sin coalición, y no dudó en criticar la actuación del Gobierno actual del país, por el abandono en el que ha dejado a su estado.
Nuevo León es la joya industrial de México, pero hoy ha perdido ese liderazgo o fue abandonado. ¿Cómo califica la labor del gobierno federal y estatal en relación a NL?
— Sin duda, Nuevo León va a ser la elección del país en 2021. Nuevo León es el bastión industrial del país, somos el estado que más aporta dinero al país y el que menos recibe. Y obviamente, ante este gobierno centralista de Andrés Manuel y ante el gobierno local de Jaime, que ha sido muy mediocre, pues Nuevo León está ávido de liderazgos que levanten la voz, que pidan justicia fiscal, es decir, que regresen lo verdaderamente justo y equitativo a nuestro estado, y también creo que Nuevo León es fundamental en el tablero electoral del 24, y por eso no podemos permitir que Morena gane en nuestro estado, porque ahí sería el acabose de la República Mexicana.
Hoy por hoy, hablamos de una división muy profunda en Morena. Incluso se habla de que le costó las elecciones en Coahuila e Hidalgo, ¿podría suceder algo similar en Nuevo León?
Jaime Rodríguez Calderón,“el Bronco”, dijo que a López Obrador le está pasando algo similar a lo que le ha sucedido a él, que prometió muchas cosas pero que no las puede conseguir o que no las puede llevar a cabo.
— Nuevo León es víctima de su éxito. Ser capital industrial trae muchos beneficios pero también muchos problemas; contaminación, saturación vehicular, inseguridad, etcétera. Yo escribí en este libro —Nuevo León, frente a la pandemia— en el que digo que a quien le toque gobernar el estado, tiene que estar consciente de que se nos vienen más de 10 crisis al mismo tiempo: económica, de salud con el Covid, seguridad, movilidad, basura, medio ambiente, finanzas, pensiones, déficit, baja recaudación. Si no hacemos algo extraordinario para replantear el Convenio o salir, quien llegue va a ser otro mediocre más en la historia de Nuevo León. Por eso, Nuevo León necesita una voz que dé un manotazo, porque si Nuevo León pone 460 mil millones al año al país, no es justo que nos regresen 69 mil como lo planteaba Morena en el presupuesto de riesgos de 2021, y ahí se ocupa a alguien realmente valiente y con los tamaños para defender a Nuevo León de este trato y de éste Convenio que lleva 40 años exprimiéndonos.
Es tiempo, como usted dice de volver a ese liderazgo y en este libro habla de 12 proyectos fundamentales que tendrían que llevarse a cabo en los próximos 7 años.
Así es. Si Nuevo León renegocia o sale del pacto, por ejemplo, si cambiamos la fórmula, nos pueden llegar 21 mil millones extra. Si en lugar de 80-20, cambiamos a 60-40, nos llegarían 42 mil. Si nos regresan la mitad del IVA. 8.26, nos darían 36 mil millones al año. Entonces, con un presupuesto de 105, más lo renegociado, Nuevo León sí va a tener dinero para un nuevo hub aeroportuario… Texcoco, que se canceló, puede irse a Nuevo León porque nuestro aeropuerto sí tiene espacio para doble pista, ninguna otra ciudad en México lo tiene. Podríamos construir las nuevas carreteras que urgen: la interserrana, que conectaría la zona metropolitana con el sur, con Galeana, Nuevo León. Y La Gloria-Colombia, que conectaría la zona metropolitana con el norte, con nuestra aduana con Estados Unidos, Colombia. Podríamos tener nuevas presas, reestructurar el transporte público, una agencia de calidad de aire, refundar Fuerza Civil, que es la policía estatal; terminar Fuerza Regia, que es la policía local del municipio, que está a la mitad de lo que debería de tener; y bueno, trenes de García a Apodaca, línea 3 y 4 del metro, proyectos de infraestructura, nueva Constitución… aquí detallo noventa políticas públicas que urgen, pero no hay dinero y esto sí podría convertir a Nuevo León en Texas, pero se ocupa voluntad.
Hablaba de la línea 3 del metro, en diciembre del 2012, Enrique Peña Nieto prometió esa obra que está hoy sin terminar.
—Sí, pues por culpa de Peña y de Rodrigo Medina que quiso hacer un atraco ahí su papá y luego de “el Bronco” que por un “moche” se quedaron estancados los vagones en Fráncfort, Alemania, hoy tenemos 7 años de retraso. ¿Qué hay que buscar? Terminarla cuanto antes pero luego ir por la 4 y la 5. Una muy importante, sería la de Santa Catarina hasta Mederos, por toda Lázaro Cárdenas, para darle vida al sur de la ciudad.
¿Cuál sería su modelo de negocio? Pudiéramos hablar, a lo mejor, del modelo que está llevando Alfaro en Jalisco.
—Yo creo que cada Estado es diferente. Nuevo León es empresarial 100%. El problema de Nuevo León es que nadie se ha atrevido a modificar la estructura del gobierno. Tenemos un gobierno grande, lento, y que tiende siempre a decir que no. “Es que la ley no me lo permite”, “es que no hay dinero”, “es que el Congreso no me aprobó la ley”. Nuevo León necesita un gobierno tipo gerencial-empresarial, flexible, horizontal, que tenga los mejores perfiles y no los cuates de la política, o los amigos del partido y creo que Movimiento Ciudadano puede hacer una convocatoria a todo el talento de Nuevo León, como por ejemplo a Consejo Nuevo León; que lleguen los mejores, que tengan autonomía técnica, los secretarios y las paraestatales, y tener un gobierno flexible que busque “el como sí” y no lo que hemos tenido ya durante décadas.
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Con mucha visión.
—Sí, pues aquí hay un proyecto de visión de Estado y al que le toque, no tiene que ser Samuel García, al que le toque, creo que aquí está la receta de 9 años, de 3 doctorados, de cómo podemos sacar adelante a Nuevo León y que a la gente de nuestro estado le vaya bien.
Para usted que está en el Senado, a nivel nacional también hay muchos temas sobre la mesa, por lo que vamos a hablar rápido de los fideicomisos que desaparecieron, y sobre cómo ve la gestión sanitaria de la pandemia tanto a nivel nacional como a nivel estatal.
— Empiezo con la última, la gestión sanitaria pésima. Creo que somos el ejemplo de cómo no se tiene que llevar una pandemia. López Gatell decía en marzo que el peor escenario eran 8,000 muertes. Así al extremo 15,000 y un evento así catastrófico 30,000. Hoy van 85 mil. Violaron la Constitución, no hubo coordinación, se tenía que haber instaurado el Consejo de Salubridad y que debió enviar directrices obligatorias a estados y municipios, y no. Cada quien hizo lo que quiso, no hubo pruebas, modelo centinela fallido. Entonces, creo que la pandemia se manejó de manera pésima, aparte no hubo un plan fiscal, no hubo un plan financiero, somos el único país en el mundo en el que no se propuso, ni se bajaron o eliminaron impuestos, aquí al contrario, se crearon los digitales en marzo en plena pandemia, y por eso también, el post-covid económico va a ser catastrófico. Menos 20 (-20%) el último trimestre, este que viene puede ser menos 12 (-12%), vamos a ser el país que más va a tardar en recuperarse, entonces, pésimo manejo de la 4T, y creo que en el 2021 les van a dar cuello, porque les dimos la oportunidad y fueron retrógradas. Un gobierno rancio y muy centralista.
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