TAILANDIA.- El hambre es más dura, y quedó comprobado con un paquidermo el cual se enfureció al no encontrar alimento tras largos recorridos y cuál fue su acabose un hogar tailandés al cual le pidió de forma no tan amable una bolsa de arroz.
El elefante cruzó por la cocina destrozando la pared, los habitantes se lograron dar cuenta que alguien más se encontraba en el hogar, al ver su una enorme cabeza hurgando en la alacena.
La madre de familia comentó que la reparación del daño saldrá en aproximadamente 1.580 dólares , mientras que el Elefante se fue sin compromiso alguno al bosque.
Datos proporcionados por autoridades en Tailandia se encuentran aproximadamente unos 2mil de estos ejemplares, los cuales causan destrozos en hogares frecuentemente.
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