CDMX.- El desnudo no es el único rasgo que comparten las fotografías de la colectiva “Cuerpos Expiados”, que se expone en la galería López Quiroga.
Se trata de una muestra donde el cuerpo es tan relevante como la mirada del espectador, un gesto que da sentido a la exhibición misma, como escribe Alberto Dallal en un ensayo de la muestra: “Comprobamos en estas fotos que no hay arte completo y pleno sin la mirada del espectador: nosotros mismos, observadores convertidos en protagonistas tras la expiación de nuestras dudas, sobresaltos, prejuicios y defensas culturales o anímicas”.
La exposición incluye fotografías, casi todas copias de época, de un grupo amplio y diverso, de muy distintos orígenes y generaciones; son más de 40 creadores como los artistas y fotógrafos Lola Álvarez Bravo, Manuel Álvarez Bravo, Nobuyoshi Araki, Lázaro Blanco, Victoria Blasco, Antonio Caballero, Marco Antonio Cruz, Armando Cristeto, Rafael Doniz, Paz Errázuriz, Fernell Franco, Héctor García, Paolo Gasparini, Lourdes Grobet, los Hermanos Mayo, Graciela Iturbide, Nacho López, Jesús Magaña, Luis Márquez, Pedro Meyer, Rodrigo Moya, Walter Reuter, Antonio Reynoso, José Trinidad Romero, Sebastiao Salgado, Jeanloup Sieff, Smart (Librado García), Mario Testino y Edward Weston.
Hay en estos cuerpos poses, abrazos, coqueteos a la cámara, el trabajo de la tierra, oficios, prostitución, exhibición, belleza.
Las fotos de “Cuerpos expiados” afirma Dallal, “se convierten en nuevas formas de un arte inesperado pero eficiente –como toda obra de arte— que transitan en dirección de nuestras preferencias, de nuestros recuerdos e inclinaciones”.
El investigador escribe que “estas fotos tienen por objetivo “causar estragos, constreñir almas (¿razón social de toda fotografía?). Escarbar en la mirada, la conciencia, la secuencia cultural de cada observador”.
“Cuerpos Expiados” se exhibirá hasta el 5 de noviembre en la galería López Quiroga, Aristóteles 169, Polanco.