CIUDAD DE MÉXICO.- En vida, la cantante Jenni Rivera tuvo que enfrentar una dura realidad: el abuso sexual de sus dos hijas mayores y de su hermana Rosie, por parte de su primer esposo Trinidad Marín, quien actualmente cumple una condena en prisión por 31 años.
La hija mayor de la fallecida Gran Señora, asegura que recuerda muy bien cada detalle de ese momento marcó su joven vida para siempre.
La cantante recuerda que ella y su familia estaban en la playa; habían vuelto a casa después de que una ola revolcara a su hermana Jacquie: “me acuerdo de todos los detalles. Nos asustamos y volvimos a casa, mi tía estaba haciendo creo que un caldo de pescado. Estábamos todas llenas de arena y mi papá me mandó a bañar”.
Chiquis obedeció. Fue a bañarse. Minutos después ocurriría el primer abuso sexual por parte de su padre.
“Yo me estaba bañando cuando el entró y me sentó en sus piernas, estaba desnuda y luego ocurrió lo que pasó”.
Aunque Trinidad Marín no le ha pedido perdón a Chiquis por lo que le hizo, ella asegura que ya lo perdonó.
A quien si le pidió perdón, fue a su hija Jacquie, quien lo visita constantemente en prisión, luego de haber hablado con sus hermanos.
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