CDMX.- Las compras de productos hechos en México tuvieron su peor desempeño en 12 meses debido al menor ingreso de la población, la caída del crédito bancario y la incesante carestía.
El consumo de bienes nacionales se redujo 1% en mayo frente a abril de este año, de acuerdo con el Indicador Mensual del Consumo Privado en el Mercado Interior del Inegi.
Se trata de la mayor caída desde mayo del año pasado, cuando se reportó una disminución de 1.2%, en plena Jornada Nacional de Sana Distancia para frenar el avance de la pandemia.
Los productos que más se dejaron de consumir fueron los artículos para la decoración de interiores, cuyas ventas se redujeron 10.4% en mayo, señalan los resultados de la Encuesta Mensual sobre Empresas Comerciales del Inegi.
Le siguió el comercio de teléfonos y computadoras, que disminuyó 6.6% y ligó dos meses a la baja. En contraste, las ventas al menudeo por internet tuvieron el mejor desempeño, con un incremento de 7.1%; continuando con los artículos para el esparcimiento, como aparatos deportivos, instrumentos musicales, equipo fotográfico y juguetes, cuyo consumo creció 6.9%.
En general, el menor consumo de bienes nacionales se debe a que los salarios de los trabajadores no se han recuperado de la importante baja del año pasado, mientras que falta restablecer miles de empleos perdidos debido a la pandemia, explica Ernesto O’Farrill, presidente de Grupo Bursamétrica.
Desde su punto de vista, la caída del crédito bancario al consumo y la mayor inflación también influyen para que los mexicanos dejen de comprar mercancías.
Cifras del Banco de México (Banxico) indican que el crédito al consumo otorgado por la banca privada disminuyó 10.1% en mayo pasado, y fue el noveno mes consecutivo con caídas a tasa de doble dígito.
Mientras tanto, la inflación tocó un nivel de 5.89% en mayo y no ha dejado de sorprender a los analistas, cuya mayoría espera que cierre este año en 6%, o incluso más arriba.
En particular, las gasolinas más caras han obligado a los mexicanos a sacrificar la compra de otros productos hechos en el país, opina O’Farrill.
Más de la mitad de los combustibles que se venden en México provienen de Estados Unidos, cuyo mayor costo explica, en parte, que el consumo de bienes internacionales haya crecido 6.9% en mayo, dice el Inegi.
Esto se dio en medio de un buen desempeño del tipo de cambio, pues el peso mexicano acumuló en mayo tres meses de ganancias frente al dólar.
Por su parte, la demanda de servicios de origen nacional aumentó 1.6% en mayo y acumula siete meses de avances.
Especialistas de Banco Base advierten que el consumo va a perder fuerza en los siguientes meses por el comienzo de la tercera ola de casos de Covid-19, la cual ha provocado que las autoridades refuercen las medidas de confinamiento, con la suspensión de algunas actividades no esenciales, especialmente en el sector de servicios.
En tanto, analistas de Banorte esperan que la demanda doméstica siga recuperándose, aunque a un menor ritmo.
(EL UNIVERSAL)
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