SALTILLO.- No hay ningún “chupacabras”, mostruo misterioso, osos o pumas, sino que es una jauría de 140 perros los que atacan y dan muerte al ganado ovino y caprino, fundamentalmente borregas y cabritos de los ejidos del sur del municipio de Saltillo, informó Jorge Salcedo.
El director forestal de la Secretaría del Medio Ambiente del Estado, agregó que lo anterior se corroboró con la instalación de cinco sensores en los corrales donde depositan el ganado menor los campesionos de las comunidades rurales del municipio.
Con los sensores se tomaron fotografías en las que se detectó que la jauría de perros atacan y dan muerte a las borregas y cabritos, fundamentalmente por la madrugada.
Dijo que se comunicó a los campesinos de los resultado de la inspección que realizó la Secretaría del Medio Ambiente del Estado y les recomendó que en coordinación con el Municipio de Saltillo lleven a cabo una campaña de desperrización y terminar con el problema que afrontan.
Solución. Jorge Salcedo recomienda matar a los perros para acabar con el problema.
Recordó que en enero y febrero de este 2018 los campesinos de los ejidos del sur de Saltillo difundieron que un “chupacabras” atacaba y mataba a las borregas y cabritos, dejándolos desangrados, pero no se los comían.
Sin embargo, dijo, que el problema se agudizó entre los ejidatarios de Guadalupe Victoria al llegar el supuesto “chupacabras”, osos o pumas a matar cerca de 30 borregas y 10 cabritos.
Destacó que la Secretaría del Medio Ambiente del Estado realizó las primeras investigaciones y detectó que las borregas y cabritos murieron porque fueron mordidos por perros de la misma comunidad, de lo cual se comunicó a los ejidatarios y se les recomendó tomar las medidas precautorias.
“Pero ahora los campesinos del ejido Guadalupe Victoria volvieron a denunciar que el animal misterioso regresó y ataco y mató a varias borregas, por lo que la secretaria del Medio Ambiente del Estado, Englantina Canales Gutiérrez, dio indicaciones para que personal y equipo se trasladara al lugar de los hechos.
“Y se procedió a instalar cinco sensores que tomaron fotografías y videos de los corrales donde se encontraba el ganado en la comunidad rural, detectando que una jauría de 140 perros son los que atacan y matan a los borregos y cabritos, dejándolos que se desangren, pero no se los comen”, afirmó.
“Las fotografías y videos que se tomarion de los ataques de los perros fueron las pruebas fehacientes del problema que afrontan en las comunidades rurales, por lo que se les recomendó solicitar el apoyo del Municipio de Saltillo, para que lleven a cabo una desperrización y terminen con el probema citado”, indicó.
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