NUEVO LAREDO.- La Casa Hogar Douglas brinda apoyo y refugio a pequeños que vivían en extrema pobreza y que incluso algunos de ellos han quedado sin la protección de un padre. Ahora, esta estancia les permite vivir en armonía, con una buena alimentación, educación, y sobre todo con el cariño que necesitan, previniendo que se conviertan en niños de la calle.
La Directora Lupita Rivera de Rendón, esposa del Director Raymundo Rendón, comentó que la mayoría de estos menores llegaron en condiciones sumamente vulnerables a dicho lugar, con problemas alimenticios, falta de atención y sobre todo de responsabilidad por parte de sus padres, situación que ha cambiado.
“Aquí reciben cuidado, alimentación, atención medica, van a la escuela, duermen, se les cuida, y se evita que corran riesgo en las calles. La situación de algunos de los menores es porque quedaron huérfanos ya sea de padre o madre, o viven en extrema pobreza. Aquí se les está dando la oportunidad de ser parte de la familia Douglas”, dijo.
Señaló que la misma sociedad ha creado conciencia de la importancia de estas estancias, por lo que grupos de empresas, amigos y familiares realizan actividades a favor de estos menores, principalmente en esta temporada.
El pequeño Mauricio de 6 años de edad, es uno de los menores que vive en este sitio, quien aseguró que se siente seguro y feliz, ya que tiene amigos y gente que lo quiere.
“Yo quisiera un carrito en esta navidad. Cuando estoy aquí juego con mis amiguitos, me baño, me pongo ropa, como, hago tarea, y me porto bien. Cuando sea grande quiero ser policía para arrestar a los que roban y que les quitan a los demás, y también a los que les pegan a las niñas”, dijo el pequeño.
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