Con el resabio de una humillante derrota en Iowa, el magnate Donald Trump desató este miércoles una tormenta de ataques contra el vencedor del primer caucus republicano, Ted Cruz, a quien acusó de haberse robado las elecciones y demandó la repetición del proceso.
A través de Twitter, Trump acusó a la campaña de Cruz de tácticas fraudulentas como, por ejemplo, hablar del inminente abandono de Ben Carson, uno de los principales rivales de Cruz entre el electorado evangelista. “Las elecciones deberían anularse”, dijo Trump en un acto celebrado en la localidad de Milford, New Hampshire, desde donde intentaba recomponerse para imponerse en las primarias de ese estado el próximo 9 de febrero.
“Lo que hizo Ted Cruz es una porquería y es una desgracia que haya mentido sobre la supuesta retirada de Ben Carson quien sigue en la contienda”, añadió Trump en una jornada en que otros candidatos como el senador por Kentucky, Rand Paul, y el ex senador por Pennsylvania, Rick Santorum, decidieron retirarse de la contienda tras los malos resultados en Iowa.
Las demandas de Trump fueron interpretadas como “un pataleo” del magnate que difícilmente serán tomadas en serio por las autoridades electorales de Iowa o por los máximos responsables de los consejos estatales demócrata y republicano.
“Esto es un pataleo. No hay ninguna posibilidad de que se repitan los caucus de Iowa”, aseguró Larry Sabato, de la Universidad de Virginia. “Trump perdió por la sencilla razón de que no estuvo a la altura en la estrategia sobre el terreno”, añadió Sabato en referencia a los operadores de otras campañas como la de Cruz que desplegó a cientos de voluntarios para asegurarse el voto evangelista que representa más de 50% del total en Iowa.
La campaña de Cruz respondió a las acusaciones de Trump mediante un comunicado: “Trump perdió en Iowa y ahora nadie está hablando de él. Es lo que pasa cuando la realidad da un paso al frente y pone fin a la realidad de una estrella de la tv. Por ello el señor Trump está estallando ahora a través de su cuenta en Twitter”.
“Si Donald Trump perdió en Iowa se debió a que, después de todo, no era tan popular como él creía entre la base conservadora y evangelista de ese estado”, consideró el analista en demoscopia, Nate Silver. “Estos reclamos de Trump son ridículos y es imposible contemplar un escenario con la repetición de los caucus en Iowa”, aseguró a su vez, Juan Carlos Hidalgo, analista del Cato Institute. “Lo interesante del pronunciamiento de Trump es que apunta hacia una teoría de la conspiración que le permitiría preparar el terreno para una candidatura independiente con la que ha amenazado desde el principio”, añadió Hidalgo.
Los pataleos de Trump ocurren a 6 días de las primarias en New Hamp- shire . Según la página de Real Clear Politics, Trump tiene 33% de las preferencias, seguido por Cruz con 11.7% y Marco Rubio, senador por Florida, con 10.7%.