OAKLAND, EU.- Los Warriors de Golden State encontraron en casa el tanque de oxígeno que significó la victoria 120-111 sobre el Thunder de Oklahoma City, lo que les permite sobrevivir en la Final de la Conferencia Oeste.
Stephen Curry se sacudió la crítica que lo señaló como “un buen tirador más”, y además de terminar como el líder anotador de Warriors, supo bajar las pulsaciones en un encuentro que tuvo minutos de altas temperaturas.
Curry sumó 31 unidades, siete rebotes y seis asistencias.
Con la presión de dejar vacante el título de la NBA e inservible la marca histórica de más victorias en una temporada (73), los Warriors mantuvieron la calma, a pesar de que a cinco minutos del tercer cuarto el Thunder se puso adelante en el marcador. Fue la única ventaja de la que gozó la quinteta que dirige el coach Billy Donovan.
Golden State es el cuarto equipo campeón que pelea por salir de un déficit 3-1 en serie de Playoffs. (San Antonio 2006, Boston 1987 y Los Ángeles 1986).
Una de las claves para el triunfo de los Warriors fueron los puntos en la pintura. Ahí consiguieron 48, en comparación con los 30 que logró Oklahoma State.
El partido abrió con el sello de Golden State. Un triple de Harrison Barnes. El primer parcial fue para el conjunto de Steve Kerr, que llegó tener ventaja de nueve puntos gracias a los disparos de larga distancia.