La violencia en la sierra de Badiraguato, tierra natal de Joaquín Guzmán Loera, propiciada por la disputa entre dos grupos rivales, generó que 150 familias de las comunidades y rancherías de Arroyo Seco, la Palma y la Tuna abandonaran sus hogares y buscarán refugio en las partes bajas.
Mario Valenzuela López, alcalde de Badiraguato, admitió que por la inseguridad que priva en las partes más altas solicitó la presencia del Ejército y la Marina para controlar la región, en la que no se tienen reportes de personas muertas, ni saqueos, como se ha divulgado.
Confirmó, sin embargo, que 150 familias radicadas en pequeñas comunidades y rancherías determinaron bajar en busca de cobijo con algunos familiares, por lo que se les va a brindar ayuda y alimentos.
Valenzuela López explicó que no tiene evidencias que en la Tuna, la casa de Consuelo Loera, madre de “El Chapo”, haya sido saqueada por hombres armados que se aduce se apoderaron de dos automóviles.
Mario López Valdez, gobernador del estado, admitió que se tiene conocimiento que en la zona serrana penetró un grupo armado, sin conocerse el número.
Precisó que no se cuenta con datos precisos que puedan certificar las versiones mediáticas que se han difundido, puesto que por la ubicación de los poblados, se estima que los grupos mixtos enviados tardarán más de seis horas en llegar.