Los Cowboys cabalgan a postemporada. En un partido en el que tuvo que sudar hasta la última gota, Dallas doblegó 17-15 a los Vikings de Minnesota, con lo que esperan un empate o derrota de los Buccaneers de Tampa Bay o los Redskins de Washington para amarrar su boleto.
Cuando perdían 7-9, los Cowboys ejecutaron una ofensiva que culminó con pase de ocho yardas de Dak Prescott a las manos de Dez Bryant para tomar la ventaja en el marcador.
Fue la recepción 65 de touchdown para Bryant, que empata a Michael Irving como los receptores que más han anotado en la historia de la franquicia.
El juego no fue sencillo para Dallas, que hilvana 11 triunfos consecutivos para lograr su racha más larga en la NFL. Por segunda ocasión en la campaña, (Semana 6 contra los Packers de Green Bay), el equipo de la estrella solitaria sufrió dos pérdidas de balón.
Prescott, quien es líder en yardas entre los quarterbacks novatos, culminó la noche con 139 yardas y un pase de anotación. El egresado de Mississippi State fue capturado tres veces, su segunda mayor cantidad luego de las cuatro que tuvo contra Washington en la Semana 6.
Ezekiel Elliott tomó 19 acarreos que redituaron en 85 yardas.
Los Vikings se encargaron de inaugurar el marcador gracias a un gol de campo de 48 yardas de de Kai Forbath en el primer cuarto. El pateador completó tres en el juego.
Con acarreo de una yarda de Elliott, Dallas se puso arriba en el segundo periodo.
Sam Bradford quarterback de los Vikings completó 25 de los 38 pases que intentó para 192 yardas.
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