CIUDAD DE MÉXICO.- El sistema de retiro y pensiones en México será insostenible a mediano plazo, debe corregirse ahora para evitar una crisis social parecida a la que se vive actualmente en algunos países de América Latina, así lo confiaron legisladores y líderes de instituciones públicas de seguridad social en la Inauguración de la Semana Nacional de Seguridad Social.
El director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Mikel Arriola, afirmó que la única ruta es la disciplina financiera, pues el instituto constantemente tiene que ejercer acciones de control de gasto a fin de garantizar todos los servicios que ofrece a sus derechohabientes.
“El IMSS debe hacer frente a un flujo creciente de pagos por jubilaciones y pensiones, el cual representa un gasto de más de dos billones de pesos durante los próximos 70 años (…) ese es el saldo de un régimen que en vez de establecer edad de retiro, establecía años trabajadores”, abundó.“Las tendencias del sistema privado de capitalización individual anuncian un negro panorama, millones de trabajadores, al llegar a la edad de retiro no tendrán pensión, ya no digamos digna; no tendrán pensión”, anunció el senador Fernando Mayans (PRD).
José Reyes Baeza, director del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), señaló que el problema es que los trabajadores se están jubilando a una edad joven. “Antes no se tenía el impacto en las finanzas públicas porque la esperanza de vida era de 60 años, ahora es de 76 o más”, explicó.
En su oportunidad, el general Jesús Javier Castillo, director del Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas Mexicanas, comentó que para los integrantes de las fuerzas armadas el retiro y el sistema de pensiones es un pilar moral para la institución, pues representa la posibilidad de que la familia siga adelante.
La diputada Araceli Damián, apuntó que el discurso de insostenibilidad de los sistemas de seguridad social no puede seguir siendo un argumento ante los problemas que se avecinan, en respuesta, debe hacerse frente al problema de que el ahorro de los trabajadores fue utilizado para “fines distintos a las pensiones”.
“Se construyeron hospitales, centros deportivos, escuelas, viviendas y posiblemente sirvió para enriquecimiento ilícito de algunos funcionarios”, dijo. Al respecto, la senadora Luz María Beristain (PRD) sentenció que “los trabajadores mexicanos no tienen por qué pagar por una corrupción que ellos no generaron”.
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