Ultraderecha, de fiesta       

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Los resultados del Brexit dieron nuevos bríos a los partidos populistas de toda Europa. (elperiodico.com)

MADRID, España.- Los resultados del Brexit dieron nuevos bríos a los partidos populistas de toda Europa, que se apresuraron a pedir su turno para votar también la salida de la Unión Europea (UE).

Nigel Farage, gran impulsor del referéndum británico, dijo que el Brexit será una inspiración para las fuerzas eurófobas del continente. Horas más tarde, Geert Wilders, de la formación de extrema derecha Partido de la Libertad, pidió un referéndum en Holanda, un Nedexit. En Francia, Marine Le Pen, del Frente Nacional, dijo que si gana las elecciones en 2017 impulsará una consulta para dejar Europa, algo que cree debería plantearse el resto de países europeos.

Una cosa parecida pidió Matteo Salvini, de la Liga Norte Italiana, al señalar que “ha llegado el turno para Italia”, como creen también los eurófobos daneses.

Ilaria Maselli, economista jefe del grupo de investigación The Conference Board, dijo este viernes que la desvinculación británica de Europa no será un proceso limpio, sino un “largo adiós”, con una ola de consecuencias políticas. Una de las primeras la adelantó Nicola Sturgeon. La primera ministra de Escocia dijo que, tras activarse la salida británica, un nuevo referéndum sobre la independencia de Escocia es “altamente probable”. En el primero (2014), el gran argumento de Londres para que Escocia rechazara la independencia fue que ésta la colocaba fuera de Europa. Tras el sí al Brexit, Escocia quiere permanecer en la UE a cualquier precio. Algo similar podría ocurrir en Irlanda del Norte, otra de las escasas regiones donde ganó la permanencia en la UE en la votación del jueves.

España no se quedó atrás. El canciller José Manuel García-Margallo señaló que el Brexit es buen momento para lograr la soberanía compartida de Gibraltar, desde 1713 colonia británica en el sur español.

Pero si Escocia convoca a referéndum para separarse de Reino Unido, planteará un precedente letal para Cataluña, que siempre ha visto a los escoceses como su referente.

Así, el divorcio británico ha abierto una caja de Pandora que Europa necesita cerrar de inmediato.