Trump y Sanders ganan en New Hampshire

“México lo va a pagar. Si no tenemos una frontera, no tenemos un país. Ahora mismo, la gente entra y sale como si nada”, afirmó Trump

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Trump y Sanders (Internet / Archivo)

El magnate inmobiliario Donald Trump y el veterano senador por Vermont, Bernie Sanders, confirmaron este martes su calidad de favoritos en las primarias de New Hampshire, con una victoria inapelable que reafirmó las preferencias de ese estado del medio oeste con los candidatos de vena independiente.

Trump festejó su victoria, con el doble de votos de su más cercano rival, rindiendo homenaje a sus padres “Marie y Fred, que seguro me están viendo desde allá arriba (en el cielo)”, y dando las gracias a los votantes de New Hampshire. “Les anuncio que habrá más semanas, muchas más semanas con muchas victorias”, aseguró.

Trump reiteró su promesa de renegociar con países como China, Japón y México para evitar que sigan estafando a Estados Unidos y e insistió en su propuesta de construir un muro en la frontera con México y hacer pagar por ello al gobierno de ese país.

“Vamos a asegurar nuestras fronteras. Lo vamos a hacer”, insistió Trump quien el martes, poco antes de conocerse su victoria en las urnas, adelantó que el precio para construir ese muro será de 8 mil millones de dólares.

“México lo va a pagar. Si no tenemos una frontera, no tenemos un país. Ahora mismo, la gente entra y sale como si nada”, afirmó Trump, al ofrecer un cálculo aproximado que, sin embargo, resulta difícil de conciliar con el mantenimiento anual de un muro fronterizo que cuesta 18 mil millones de dólares, según cifras del Departamento de Seguridad Interna (DHS).

“Esta noche Donald Trump tiene muchas razones para celebrar ya que, tras las elecciones en New Hampshire, sigue habiendo falta de claridad sobre quién puede rebasarlo en el corto plazo en la lucha por la nominación del Partido Republicano”, opinó David Axelrod, uno de los más respetados operadores del Partido Demócrata.

Tras confirmarse su victoria por amplio margen —con más de 80% del voto de los jóvenes y 55% de las mujeres—, Sanders, quien venció a Hillary Clinton, con cerca de 20 puntos porcentuales de ventaja, agradeció por su parte a sus simpatizantes y voluntarios. Dijo que “esta noche hemos enviado un mensaje que será escuchado desde Wall Street a Washington; y de Maine a California: el gobierno de nuestro gran país pertenece a la gente y no sólo a un puñado de ricos contribuyentes de campaña o a los intereses creados”.

Sanders insistió en su llamado a favor de una “revolución política” y prometió arreglar “un sistema migratorio que está roto”. Poco antes, Clinton comparecía ante sus simpatizantes para conceder su derrota y anunciar que redoblará esfuerzos para conquistar el voto de la mayoría.

Fueron las grandes estructuras de los partidos demócrata y republicano y los candidatos más identificados con un establishment partidista que hoy es devorado por las luchas intestinas y la desafección de los ciudadanos. La victoria de dos candidatos como Trump y Sanders en New Hampshire, un estado “talismán” para todos aquellos que luchan por la presidencia, no sorprendió a los más veteranos expertos, como el analista Larry Sabato, ni a la campaña de Clinton.