ESTADOS UNIDOS.- Donald Trump ha formado una orden ejecutiva que levanta las famosas restricciones sobre la cantidad de agua que puede usar un cabezal de las regaderas, algo que había estado pidiendo el mandatario, pues aseguró que ha logrado que los baños vuelvan a ser geniales en los Estados Unidos.
Fue gracias a un comunicado publicado por la Casa Blanca, esta orden exige al secretario de Energía, Chris Wright, rescindir de inmediato la norma federal que había sido “excesivamente complicada” durante los gobiernos de Barack Obama y Joe Biden, siendo efectiva 30 días después de la publicación de este aviso.
Sin embargo, el presidente Donald Trump, se quejó a su estilo sobre la situación haciendo hincapié en que ahora podría darse un baño de manera eficiente y ahora podrá cuidar de su cabello de la mejor manera posible, recordando que al mandatario no le gustan nada las medidas implementadas por los demócratas sobre el medio ambiente.
“Me gusta bañarme bien para cuidar mi hermoso cabello… Tengo que estar de pie en la regadera 15 minutos hasta que se moja… Es ridículo”, dijo en tono sarcástico.
¿Qué busca Donald Trump con el decreto sobre las restricciones del agua?
La norma que ha desechado Donald Trump, limitaba la presión del agua en cada cabezal de regadera en el mercado a nueve litros de agua por minuto, una situación con la que el mandatario no estaba nada contento y era algo que buscaba desde su primer mandato como presidente.
Durante 2017 hasta 2021 el mandatario habló en varias ocasiones sobre las regulaciones medioambientales especialmente las relacionadas con el consumo del agua en productos como duchas, inodoros y grifos, pues su objetivo era que lavavajillas, duchas, refrigeradores y lavadoras usarán menos energía y agua.
Cabe destacar que el Appliance Standards Awareness project (ASAP), organismo que defiende la eficiencia energética, señaló que los estándares que se impusieron durante la presidencia de Biden redujeron las facturas de servicios públicos y protegen el medio ambiente.
Ahí fue donde Andre deLaski, director ejecutivo de ASAP, dijo que las reseñas de los consumidores muestran consistentemente que la mayoría de los cabezales para ducha que se venden en el mercado cumplían con el flujo de agua y que no había un problema que resolver.
Sin embargo, sí añadió que la orden de Trump es una artimaña para poder eludir una ley deficiencia energética de 1992, agregando que este cambio sería como el primero que inventó en su primer mandato, cuando ningún fabricante hizo los cambios significativos que buscaba el estadounidense.
Mantente informado las 24 horas, los 7 días de la semana. Da click en el enlace y descarga nuestra App!