CIUDAD DE MÉXICO.- Tres lobos marinos hembras, entregados voluntariamente a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) por los propietarios del Parque Acuático Atlantis de la Ciudad de México, fueron trasladados al delfinario “Dolphin Discovery Vallarta”, en Nuevo Vallarta, Nayarit.
Tras la entrega voluntaria de los ejemplares, la Profepa realizó la búsqueda de un sitio adecuado para reubicarlos, por lo que encontró el “Dolphin Discovery”, el cual cuenta con la infraestructura adecuada para su recepción y alojamiento.
Ignacio Millán Tovar, subprocurador de Recursos Naturales, explicó que ante un posible desalojo en el Parque Acuático Atlantis, se buscaba garantizar el bienestar de los lobos marinos, por lo que la empresa Convimar, propietaria de los ejemplares, entregó voluntariamente los ejemplares para evitar que estos quedarán a la intemperie.
“Muchos de los problemas que tenemos es que en cualquier momento pueden ordenar el desalojo de esta zona de Atlantis y lo que menos queremos es que estos animales queden a la intemperie, lo que estamos buscando es garantizar el bienestar de los lobos marinos. Estamos previendo un posible desalojo y lo que menos queremos es que los animales queden a la intérprete, buscamos un sitio donde les dieran las mejores condiciones para que continúen su vida”, afirmó.
Destacó que estos tres lobos marinos son los últimos que quedaban en el Parque Acuático Atlantis, ubicado en la tercera sección del bosque de Chapultepec, ya que los otros delfines que tenían fueron reubicados en diferentes sitios.
Destacó que en las instalaciones del Parque Acuático Atlantis cumplen con lo dispuesto en la norma oficial mexicana NOM 135 y que en las inspecciones realizadas en los últimos años no se encontraron infracciones a la legislación ambiental.
El subprocurador de la Profepa detalló que a fin de garantizar la seguridad y las condiciones de transportación para dichos animales, se contó con el apoyo de la Secretaría de Marina, que permitió el traslado de los tres lobos marinos mediante la utilización de una aeronave tipo CASA 295.
Los tres lobos marinos trasladados son hembras, de nombre Fany de 26 años de edad y peso de 150 kilos; Shasta de 27 años y 150 kilos de peso, y Mily de 22 años y 140 kilos de peso.
Los tres ejemplares presentan afecciones propias de su edad como cataratas en los ojos y verrugas pero además de eso se encuentran en buen estado de salud.
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