ESTADOS UNIDOS.- Sigue la tensión por el asteroide 2024 YR4 ya que a pesar de que la NASA (Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos) señaló en su reciente informe sobre la casi nula probabilidad de que el cuerpo espacial impacte a la Tierra, trabajan en los tres métodos que hay para desviar su trayectoria.
La NASA fue clara al indicar el resultado del análisis realizado por los expertos del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) que tras calcular modelos más precisos de la trayectoria del asteroide, actualizaron su probabilidad de impacto.
De manera que la llegada del asteroide 2024 YR4 a la Tierra estimada para el 22 de noviembre de 2032 se redujo al 0.004 por ciento, por lo que concluyeron que no hay un potencial significativo de que este asteroide impacte el planeta, indicó la agencia espacial en su reciente tarjeta informativa.
No obstante, la NASA aseguró que todavía existe una probabilidad aunque muy pequeña, de que el asteroide 2024 YR4 impacte la Luna, y sería el próximo 22 de diciembre de 2032, cuya probabilidad, indicó la agencia espacial estadounidense, es actualmente del 1.7 por ciento.

Las tres formas de desviar asteroides de la Tierra y la Luna
La NASA informó que los equipos de defensa planetaria seguirán monitoreando el asteroide para mejorar las predicciones de la trayectoria del asteroide, a pesar de la reciente actualización que por el momento pone a salvo a la humanidad de sufrir una explosión nuclear de gran magnitud que produciría el impacto del asteroide.
Pero la posible llegada del asteroide 2024 YR4 en la Luna podría traer afectaciones a la Tierra, al respecto el ingeniero del Catalina Sky Survey de la NASA, David Rankin, señala que el satélite natural ayuda al planeta a evitar que se tambaleé demasiado sobre su eje, y lo ayuda a estabilizar el clima. Para evitar una coalición, la agencia espacial tiene tres métodos para frenar:
- Deflexión láser: Con láseres de alta potencia se calentaría la superficie del asteroide para destruir un fragmento con el fin de crear un empuje para cambiar la trayectoria.
- Impacto cinético: Una nave espacial no tripulada se estrellaría en el cuerpo celeste, este método fue probado en 2022 en la misión DART (Double Asteroid Redirection Test).
- Explosión nuclear: A través de la detonación de una carga nuclear cerca del asteroide para fragmentarlo al alterar su masa; sin embargo, implica riesgos.
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