BAJA CALIFORNIA SUR.- Adán Arana fue un pescador bastante conocido en el puerto de San Carlos, Baja California Sur, y cuya última voluntad ha sorprendido a todos: ser sepultado en la camioneta pick-up que le regalaron sus hijos, pero que no pudo disfrutar a causa de una enfermedad.
Para ser enterrado junto al obsequio de sus hijos, trabajadores tuvieron que cavar una enorme zanja, y luego construir una serie de paredes con cemento y block, donde el cuerpo de Don Adán y el vehículo reposarán para la eternidad.
El cuerpo de Adán Arana fue colocado dentro de un ataúd, el cual fue puesto en el cajón de la camioneta durante el sepelio. Tanto la camioneta como el féretro fueron trasladados al panteón municipal de San Carlos para darles sepultura.
Al funeral acudieron los familiares y amigos de Adán Arana, además de una grúa que levantó y depositó la camioneta con el cuerpo en la fosa previamente cavada, lo cual sorprendió a los asistentes y que muchos tomaran fotografías del momento.
Don Adán era un personaje bastante conocido dentro de la administración portuaria y sobrino del exdelegado municipal, Pepe Arana, según información de El Sudcaliforniano, por lo que en el funeral también hubo comerciantes e integrantes del sector pesquero.
La última voluntad del pescador causó opiniones divididas en redes sociales, mientras unos consideran que fue una actitud “materialista”, otros creen que fue una muestra de respeto a lo que se ganaron sus hijos con su trabajo.
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