Este 20 de abril se conmemoran 23 años de la muerte de Fortino Mario Alfonso Moreno Reyes, mejor conocido como “Cantinflas”, un hombre que fue catalogado como el mejor humorista mexicano, aunque, para otros fue considerado como una persona desagradable.
Moreno Reyes fue uno de los actores más emblemáticos del Cine de Oro mexicano, ganador del Globo de Oro por su actuación en la película “La vuelta al mundo en ochenta días”, producida por Michael Todd.
Sin embargo, Mario Moreno no era tan simpático como cotidianamente lo hacía aparentar en la pantalla grande a través de su personaje “Cantinflas”, según publicó un reconocido portal de noticias, el comediante era todo lo contrario en la vida real; solía ser un hombre hostil, soberbio y muy frío, así lo revelan personas que estuvieron o convivieron de cerca de él.
Dicha publicación cuenta con la opinión de la escritora Guadalupe Loaeza quien describió a Moreno Reyes de la siguiente manera: “Era un hombre que mundanamente no era simpático, era desagradable […] Mario era un personaje muy siniestro, con una ambigüedad muy evidente. Sus colegas no lo querían”.
Caso opuesto para otras personas, Mario era una persona sumamente generosa, incluso se menciona que regaló parte de sus primeras ganancias a boleros y vendedores de periódicos.
Tenía 81 años cuando “El mimo de México” perdió la vida víctima de cáncer pulmonar, el 20 de abril de 1993 en la Ciudad de México, de donde era originario.
Sin embargo, lejos de las luces del escenario, Mario Moreno fue un hombre solitario, introvertido, que no soportaba las mentiras y se llevó muchas decepciones, sobre todo en el ámbito familiar, comentaron amigos y familiares.
Tras su deceso, se ha mantenido su labor altruista por medio de dos fundaciones en el país, además de que su nombre y términos derivados, cantinflada, cantinflear y cantinflesco, ya forman parte del diccionario de la Real Academia de la Lengua Española.
Luego de ser homenajeado por parte del pueblo en la sede de la Asociación Nacional de Actores y en el Palacio de Bellas Artes, su cuerpo fue incinerado y sus cenizas depositadas en la cripta familiar del Panteón Español de esta capital.
Inició estudios de Medicina para complacer a su padre, pero debido a la mala situación económica que vivía, tuvo que abandonar la escuela para ganarse el pan con la interpretación de pequeños papeles en espectáculos de variedades.
Fue así como trabajó en el circo, para después interpretar a “Cantinflas”, inspirado en un barrendero borrachito que conoció cuando trabajaba en el Teatro Follies.
Estuvo casado con la rusa Valentina Ivanova Zubareff hasta la fecha de su muerte, en 1966; cinco años antes habían adoptado a un niño, a quien llamaron Mario Arturo Moreno Ivanova.
Su debut en el cine fue con “No te engañes corazón”, para continuar con la exitosa “Ahí está el detalle”, y luego participar en “Ni sangre ni arena”.
Asimismo, “El gendarme desconocido”, “Los tres mosqueteros” y “Gran hotel” rompieron récords de taquilla en Latinoamérica.
Por si fuera poco, resaltó también con “Pepe”, “Don Quijote cabalga de nuevo”, “El siete machos”, “Si yo fuera diputado” y “El señor fotógrafo”, así como “El bolero de Raquel”, su primera película en formato a color.
Fue calificado por Charles Chaplin como el Mejor Comediante del Mundo, y de acuerdo con su hijo Mario Arturo Moreno Ivanova, además de que ya se venden salsas con su nombre y camisetas, se planea la realización del “Proyecto Cantinflas”, una serie y largometraje animado, entre otras acciones.
