Wayne Rooney fue condenado a dos años sin poder manejar un automóvil y 100 horas de trabajo social tras ser detenido ebrio al volante.
Los hechos ocurrieron a las 2 de la madrugada del pasado 1 de septiembre, en ese momento el ariete de 31 años del Everton fue sorprendido por la policía, al tiempo que era acompañado por una mujer que conoció esa noche en un bar.
Por tal motivo Rooney fue sometido a juicio en un tribunal de Stockport, mismo que tuvo una breve duración debido a que el futbolista se declaró culpable, tal y como él lo dijo en un comunicado difundido por la agencia británica Press Association, en el cual también expresó sus disculpas y arrepentimiento.
“Tras la audiencia judicial de hoy, quiero pedir públicamente disculpas por mi falta de juicio al conducir (con alcohol) por encima del límite legal. Fue completamente equivocado”, explicó.
“Ya he pedido disculpas a mi familia, a mi entrenador y presidente y a todos en el Everton. Quiero ahora pedir disculpas a todos los hinchas y a quienes me han apoyado a lo largo de mi carrera. Acepto por supuesto la sentencia de la corte y espero hacer enmiendas durante mi servicio comunitario”, sentenció el otrora capitán de la Selección Inglesa.
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