El gobernador de Chihuahua, César Duarte Jáquez, rechazó ser un político corrupto y negó que al final de su mandato ( el 3 de octubre) vaya a terminar en la cárcel.
Luego de que Carlos Loret de Mola presentara una investigación en la que se acusa al gobernador de Chihuahua de que cuando era candidato, en un solo día, compró tres ranchos en el municipio de Balleza, Duarte Jáquez dijo que no tiene nada que ocultar.
Según una investigación del equipo del noticiario “Despierta” el gobernador tiene 36 propiedades, además de miles de cabezas de ganado.
Duarte señaló que ala investigación le faltan precisiones, “hay propiedades desde 1988 en mis activos, la manera en que las adquirí yo y mi familia, la herencia del rancho y los potreros”.
Aseguró que tiene 8 mil hectáreas y se debe considerar que es tierra árida, donde se necesitarían hasta 50 hectáreas para una cabeza de ganado, cuando en estados como Veracruz, en una hectárea caben 10 cabezas de ganado.
A pregunta expresa sobre si sus propiedades son fruto de la corrupción, señaló que “de ninguna manera, son propiedades previas a que yo fuera gobernador”.
Dijo que la verdadera corrupción del poder es el vínculo con el narcotráfico y es el que él ha combatido.
El gobernador de Chihuahua invitó al periodista Carlos Loret de Mola a ver sus declaraciones patrimoniales, “las hacemos públicas contigo, inmediatamente, y con tu auditorio”.