Alrededor de un millar de manifestantes, la mayoría jóvenes, intentó irrumpir este miércoles en la sede del Gobierno albanés en una protesta por la muerte de un joven que fue disparado por un policía en Tirana al saltarse el toque de queda impuesto por la pandemia de coronavirus.
Al menos nueve agentes resultaron heridos en la protesta, durante la cual varios manifestantes rompieron los cristales del portón de la sede gubernamental, lanzaron piedras, paraguas y otros objetos contra la Policía y prendieron fuego y derribaron el abeto de Navidad colocado en la entrada.
La Policía respondió con gases lacrimógenos a una protesta que comenzó de forma espontánea y consiguió apoderarse durante tres horas del principal bulevar de la capital albanesa, Deshmoret e Kombit, donde se encuentra la sede del Gobierno, el Ministerio del Interior y otras carteras.
Los manifestantes, al grito de “Queremos justicia” y “Abajo la dictadura”, exigieron la dimisión del ministro albanés del Interior, Sander Lleshaj, por la muerte de Klodian Rasha, que fue disparado por un agente la noche del martes.
La familia del joven, de 25 años, asegura que se saltó el toque de queda -en vigor entre las 22:00 y las 06:00 hora local desde hace un mes- para comprar cigarrillos.
Sin embargo, la Policía sostiene que Rasha iba armado y que el agente disparó contra él en defensa propia.
La Fiscalía ha comenzado una investigación para aclarar los hechos.
El primer ministro albanés, Edi Rama, se encuentra en Estados Unidos para negociar con la farmacéutica Pfizer la llegada a Albania de la vacuna contra la COVID-19.
En Albania, un país con 2.8 millones de habitantes, se han registrado desde que comenzó la pandemia 951 fallecimientos por coronavirus, mientras que hay 21,165 casos activos.
(EL SIGLO DE TORREÓN)
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