Por primera vez, una mujer, Yuriko Koike, fue elegida gobernadora de la ciudad de Tokio, ciudad que se prepara para acoger los Juegos Olímpicos de 2020.
Esta política con experiencia, de 64 años, miembro del Partido Liberal Demócrata, se había enfrentado a otros 20 candidatos, un número récord, tras la dimisión en junio de Yoichi Masuzoe, implicado en un escándalo financiero.
Con el 62 por ciento de los votos escrutados, Koike le sacaba 700 mil votos a su rival más cercano.
Yuriko Koike, exministra de Medio Ambiente y de Defensa, quien habla inglés y árabe, asumirá el cargo por cuatro años y tendrá que supervisar la preparación de los Juegos Olímpicos, más de medio siglo después de que la ciudad acogiera los juegos de verano por última vez, en 1964.
“Dirigiré la política de Tokio de una manera sin precedentes, será el Tokio que nunca habían visto”, declaró Koike, afónica tras dos semanas de campaña.
“Quiero un Tokio donde cada uno pueda brillar, desde los niños hasta los ancianos y las personas con discapacidades, con el fin de que la vida de todos sea mejor”, dijo.
Su mandato terminará, en teoría, justo después de la apertura de los Juegos.