El presidente Barack Obama marcó el jueves el primer aniversario del histórico acuerdo nuclear con Irán con la promesa de que Estados Unidos y sus aliados mantendrán sus compromisos siempre que Teherán se apegue al pacto. Pero los republicanos en el Congreso nuevamente intentaron desestimar el pacto internacional, el cual establece que Irán debe cerrar su programa nuclear, que estuvo cerca de contar con la capacidad de crear armamento atómico.
El pacto entre siete naciones también delinea muchas obligaciones de Occidente para poner fin a múltiples sanciones financieras, comerciales y petroleras que han afectado la economía iraní.
Obama dijo el jueves en un comunicado que el acuerdo ha tenido éxito en retrasar el programa nuclear de Irán “evitando un mayor conflicto y poniéndonos más a salvo”.
En tanto, la Cámara de Representantes, bajo control republicano, aprobó una propuesta para imponerle nuevas sanciones a Irán por su continuo desarrollo y pruebas de su programa de misiles balísticos. La votación de 246-179 se mantuvo básicamente entre las divisiones partidistas.
Los legisladores también consideraron una medida que reiteraría una política federal para negarle al gobierno y bancos iraníes el acceso a dólares estadounidenses.
El líder de la mayoría en la Cámara Baja, Kevin McCarthy, dijo que el gobierno de Obama ha demostrado que no pretende responsabilizar a Irán por su programa de misiles balísticos, violaciones a los derechos humanos y respaldo al terrorismo.
“Queremos sancionar al gobierno iraní por su actividad ilegal continua”, dijo McCarthy, republicano de California.
Los demócratas dijeron que las propuestas republicanas eran intentos descarados de sumar puntos a su partido en un año electoral.