AGUASCALIENTES.- La decisión de una madre de familia de guardar veneno para ratas en una botella de refresco provocó la muerte de su pequeño hijo de tres años.
El accidente ocurrió en la vivienda ubicada en la calle Remedios del fraccionamiento Pintores Mexicanos, donde el pequeño José Luis se encontraba con su madre y unos familiares.
En un descuido, José Luis llegó a la cocina y se encontró con una botella que pensó contenía refresco por lo que tomó el envase, lo abrió y lo bebió.
Casi de inmediato el fuerte químico comenzó a hacer estragos en su débil cuerpecito, por lo que cayó al suelo y comenzó a convulsionarse sin que nadie se percatara de ello.
Minutos después, su madre lo encontró tirado y agonizante; junto a él la botella del producto consumido.
A gritos, la mujer pidió ayuda por lo que se llamó al número de emergencias, pero ante la desesperación trasladaron al pequeño hasta la sala de emergencias del Hospital General de Zona número 2 del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Apenas llegó, los médicos y enfermeras que lo recibieron, trataron de ayudarlo sin éxito, ya que el menor falleció a los pocos minutos de ingresar.
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