El electorado neozelandés decidió en referéndum conservar su actual bandera, con lo que termina una polémica que agitó a este país de Asia Pacífico.
Hacia las 20:00 horas de este jueves (7:00 GMT), 2.1 millones de neozelandeses habían votado y el 56.6 por ciento se pronunciaron por mantener su lábaro azul, que en su extremo superior derecho muestra la Union Jack británica y en la parte izquierda las cuatro estrellas de la Cruz del Sur.
Por su parte la propuesta alternativa recibió 43.2 por ciento de los sufragios, datos aún preliminares pero con una tendencia clara que será confirmada el próximo miércoles 30 cuando se den los resultados definitivos.
Metiria Turei, líder del opositor Partido Verde, responsabilizó al primer ministro John Key de la derrota, pues aseveró que politizó el proceso y lo volvió una cruzada personal.
El voto de esta jornada concluyó un proceso que de manera formal comenzó el 5 de mayo de 2015 cuando un panel inició consultas sobre el mejor diseño para la nueva bandera.
En agosto pasado se habían recibido 10 mil 292 proyectos de enseña que fueron reducidos a 40 y luego cinco de ellas fueron llevadas al primer referéndum celebrado entre el 20 de noviembre y el 11 de diciembre pasados.
En ese lapso fue seleccionada la Silver Fern (helecho plateado), que muestra un helecho blanco que divide la bandera en una parte superior negra y una inferior azul que conserva la Cruz del Sur, finalmente rechazada.
El movimiento que buscaba la nueva insignia explicó que la actual carecía de eco emocional entre los neozelandeses, se confundía con la de Australia y como “marca país” carecía de fuerza.